Sexo con el capataz y ahora cono mi suegro
Fecha: 16/06/2022,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: ying, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... ningún otro había llegado a mi joven edad. No tardé en brindarle otro orgasmo y el seguía tan duro como al principio. Me dio la mano y me levantó del suelo, me quitó la braguita, que era lo único que tenía puesto en ese momento. Luego me levantó colocándo mis piernas alrededor de su cintura y de ese modo me clavó su verga en mi rajita. Ahora él me levantaba y me dejaba caer sobre su verga entrándome fuerte y profundo, pensé que ya no podría gemir más de lo que lo había hecho, pero no, los gemidos de placer salían de mi boca sin control. En ocasiones me sujetaba por las nalgas y me penetraba con fuertes bombeos, camino unos metros cargándome con su pija metida en mi rajita y me puso contra un árbol, me comenzó a dar duros y agresivos bombeos, yo grité y grité hasta que volví a correrme, unos segundos después pude sentir algo caliente en mi rajita, el Yony se estaba acabando adentro de mi vagina, sentí también cuando las primeras gotas de su semen salían de mi rajita, pues aún me penetraba duro. Por fin se detuvo luego de sacar hasta su última gota. Luego me puso de nuevo sobre la ropa y la hierba. Yo estaba agotada. No sabía que hacer o decir cuando me repusiera. Había sido todo una putita con Yony.
Regresamos al rancho de la finca, nadie dijo mucho de regreso. Yony me sacaría de nuevo dentro de tres días, por disposición de mi suegro a montar caballo. En los días posteriores, no le dirigí la palabra a Yony, pero el día que salímos allí estaba yo esperándolo ...
... de nuevo, fui una putita para él, lo sé. Yo llevé una frazada más grande, me llevó a la orilla de un río que pasaba por allí, pusimos la frazada y luego a gozar. Yony y yo hicimos para iniciar una 69, es decir yo le daba sexo oral a su buena verga y él se ponía entre mis muslos para chuparme la rajita y el culito, la lengua de Yony tenía algo en su lengua, o la forma que la usaba, que me hacía chillar de placer, no pude aguantarme y me vine de nuevo en su boca. Luego me puso en cuatro sobre la frazada y me comió las nalguitas bonitas que tengo, me decía -que bellas nalgas tienes Yesi, es un pecado que nadie las atienda-, me daba buenos mordiscos en mis carnes y luego su lengua rebuscaba mi ano y me daba tremendos chupones de culo que no había sentido antes. Luego dejó mis nalgas solo para poner su verga en mi rajita y me fue penetrando duro aferrándose en mi cintura, me la metió toda y luego entraba y salía. Yony gemía y es que mi rajita es estrechita para semejante pija, lo fui llevando a una corrida, pero primero llegué yo, el tal Yony tenía aguante, luego de acabar yo, el aceleró sus bombeos y me ordenó que me volteara y que abriera la boca, su verga dio varios chipotazos, mucha de su leche me cayó dentro de la boca y la fui tragando conforme me entraba. El Yony quería seguir follando, pero le dije que ya era suficiente y que regresáramos, no vayan a mandar a buscarnos.
Dos veces por semana eran las clases de montar caballo. La segunda semana la pasamos más que ...