Me deje usar como basurera - Relatos Eróticos

Me deje usar como basurera

... perdonarla por esta transgresión. Mi Cindy puede estar tomando la polla de un extraño en su boca, pero después de todo es solo una mamada...

Mis pensamientos se rompieron cuando los 2 chicos sentados frente a nosotros se dieron la vuelta y finalmente la notaron. Traté de darle a Cindy nuestra señal de "peligro" – 2 toses – eso indicaría mi deseo de irme inmediatamente. Habíamos preseleccionado esta señal si me sentía incómodo en algún momento con lo que estaba sucediendo, y definitivamente me sentía incómodo. Quería sacarla de allí lo más rápido posible. Esperé a que dejara de chupársela al desconocido y se levantara para marcharse. Ella no dio ninguna indicación de que incluso me había oído. Sus labios seguían subiendo y bajando amorosamente por su eje lentamente. Debe estar limpio ahora, pensé con tristeza mientras tosía dos veces de nuevo; todo lo que había estado en su eje había sido comido por Cindy.
Silenciosamente, el hombre nuevo se acercó sigilosamente. Parecía tener unos 50 años y debía ser una especie de vagabundo dado el estado andrajoso y sucio de su ropa. Una vez más me tambaleé por el hedor cuando se quitó la ropa y reveló un pene de 8" de largo que probablemente no había sido lavado en unos 6 meses. Se arrodilló detrás de mi Cindy y me di cuenta con completo horror de que la iba a follar. ". Realmente no quería que esto sucediera, especialmente no con estos bastardos. Tosí dos veces más, no es que importara. Era demasiado tarde. Mi mente estaba acelerada ...

... en mi tortura privada; observé con tristeza cómo el vagabundo aliviaba su dolor". La vara gorda en el coño demasiado húmedo de Cindy. Mi corazón se rompió cuando la escuché gemir levemente, su vara ahora se deslizaba fácilmente dentro y fuera de su coño. Estaba viendo cómo la follaban. No solo la follaban, sino que la follaban a pelo.

Meció su maloliente polla dentro de ella mientras ella continuaba chupando ese pene. Su dueño ahora estaba listo para correrse, y ella lo sabía. Ella se quitó la vara por un momento y con una vocecita bastante pequeña, casi susurrando, dijo "correte en mi cara". Todos lo escucharon. Se agachó y bombeó su vara rápidamente mientras ella chupaba su gorda cabeza roja. Cuando estaba a punto de correrse, le quitó la cabeza de la polla y la empujó más abajo, en posición. Ella lo miró, profundamente en sus ojos con una lujuria que nunca antes había visto cuando él alcanzó su máximo placer y eyaculó en toda su cara. Salió disparado en gruesas cuerdas blancas de semen, saltando hacia su cabello, sus ojos, nariz, mejillas, labios y lengua. Ella lo aceptó todo sin quejarse. Noté que su coño temblaba alrededor de la polla que la estaba follando, y sabía en el fondo de mi corazón que a ella le encantaba esto. Finalmente terminó de pintar su cara con su semen, y ordeñó su polla hasta secarla. Ella lo vio en silencio ordeñar su polla, su rostro ahora cubierto con su semilla. Deslizaba su mano desde la parte inferior de su pene hasta la punta, y mientras lo ...