La endidura perfecta parte 2 - Relatos Eróticos

La endidura perfecta parte 2

En los días siguientes después de que pude tocar sus pechos, fuimos un día a su casa me habló de que algunas amigas suyas ya había perdido su virginidad y ella no supo responder cuando le cuestionaron, eso me puso dudoso a mí así que le pregunté por qué, a ella su mamá le dijo que la virginidad se perdía si hacían ejercicio o andaba en bici no sabía si aún seguía virgen, yo aproveche eso para decirle que podía confirmar si aún seguía así si me dejaba ver su himen, ella dudo un poco pero después de unos momentos ella acepto, cerró la puerta con seguro y levantó su falda se quitó las bragas, se recostó en la cama abriendo sus piernas, su vagina estaba depilada, tenía una endidura perfecta bien cerrada.

Podía ver en sus ojos una angustia, yo tenía mi pene bien erecto no importo mucho era la primera vagina que veia, con mis dedos estire los labios, tenía un color rosa muy hermoso, tenía un aroma que me prendía más, pude ver lo que parecía ser un himen la verdad nunca había visto una vagina era mi oportunidad de aprovechar que ella no decía nada, abrí muy ...

... bien estaba un poco húmeda ella estaba muy sensible me preguntó si lo veía le dije que nesecitaba ver más, toque su clítoris, con mi dedo jugué con el un tiempo, ella estaba cada vez más sensible.
 dure poco más de un minuto y empezó a humedecerse, no m decía que parara al contrario se humedeció más y más estaba muy húmeda y sensible quería probar esa vagina vrgien.

Jimena: -aay.... Aaa... Espera....

Yo: -Tranquila quiero prob....

Ya estábamos en más acción cuando escuchamos que su madre llegó a la casa rápidamente ella se puso las bragas y le quitó el seguro al cuarto, el día paso con normalidad yo tenía ganas de probar su miel estabamos calientes pero ya no pudimos hacer nada, tuve que maleta mis dedos mojados por su vagina, apuesto que tiene un gran sabor por qué su aroma me encanto.

Al día siguiente ella hablo poco conmigo estaba nervioso no quería perder mi amistad con ella, ni tampoco mi oportunidad de algo más con ella. Paso el día y a la hora de salida, acordamos ir a vernos a mi casa, estaba seguro que hoy podría hacer algo más con ella.