El nativo
Fecha: 20/08/2022,
Categorías:
Sexo Interracial
Tus Relatos
Autor: Lola, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Acabo de regresar de un viaje a Colombia. Pasé un mes recorriendo, los primeros de as fueron de playas, me instalé en un camping al Este de Cañaveral. Es bellísimo, tranquilo y lo pasé genial.
Cuando me iba de ahí una chica, Sara, que me pidió si la acercaba a San Cristóbal. Yo alquile un vehículo tipo camioneta, así que tenía lugar y la idea de recorrer, por lo cual acepté llevarla.
En el camino me orientó sobre algunas zonas que recomendaba, sus comidas y hablando me enteré que entraba a la facultad a estudiar medicina ese año y que trabajaba para juntar plata.
Fue muy agradable el viaje y realmente nos divertimos juntas riendo mucho.
Al llegar me quedé una noche en su casa con su familia que me trató como una hija.
Al otro día emprendí viaje para Bucaramanga dónde pensaba aprovechar el vehículo que era alto para recorrer fuera de ruta, por caminos internos y conocer.
Al cargar combustible, aproveché a parar y comer algo ya que había viajado más de seis horas sin tomar nada.
Comí algo liviano y tome un té, para poder seguir manejando.
Al irme me crucé con un moreno alto, que al verme me sonrió cediendo el paso mientras hacía un gesto de sacarse el sombrero, que no tenía, con una reverencia
Me causó mucha gracia y rei de buena gana, eso fue suficiente para que me hablara.
Me preguntó de dónde era, y al decirle de Córdoba en Argentina, me confesó que no tenía idea
Le trate de explicar pero parecía no entender, así que me propuso tomar algo y que le dibujara para ...
... mejor idea
Me di cuenta que quería algo más, lo volví a mirar y ahora notaba que tenía ojos grises muy lindos. Acepté
Consiguió papel y un lápiz al llegar a un bar y nos sentamos riendo de su actitud.
Estuvimos más de tres horas antes que me diera cuenta que se había hecho muy tarde para volver a la ruta, así que le pregunté por hospedaje
Me dijo que ahí no había y que tenía unos 90/100 kms antes de un hotel.
Cómo me vio preocupada, me ofreció su casa. Cómo me negué, insistió contándome que tenía un sillón grande para ofrecerme
Acepté y fuimos unos diez minutos al sur, al llegar ví una casa simple y muy linda pintada de amarillo y blanco, que se notaba prolija.
Entramos me preparó un café y yo le ofrecí unos chocolates que había comprado
Compartimos más de cuatro horas hablando y riendo, contándonos historias nuestras y el motivo de mi viaje.
Era separado sin hijos, trabajaba por si cuenta y siempre había vivido en la zona.
Nos fuimos a dormir y al otro dia me despertó un señor ave olor a café y pan tostado, era que Santiago había preparado el desayuno.
Me fui al baño y al salir desayunamos, le pedí que me oriente sobre destinos y lugares a visitar
Se puso a dibujar en varios papeles, con destinos posibles que me recomendaba
Se ofreció a acompañarme en alguno y acepté
Nos fuimos por caminos internos, metiendo en zonas más inóspitas hasta que en medio de la nada apareció un lago de aguas verdes bellísimo.
Paramos, saqué fotos y recorrimos el lugar un poco.
En un ...