Mi amiga Carla y yo con final inesperado - Relatos Eróticos

Mi amiga Carla y yo con final inesperado

... muy caliente pero se mueve muy rico ahhh, estaba en la misma situación que ella cuando el cerdo se viene sacando su pene lentamente de mi vagina casi llegando suelta su gelatina, veo a mi amiga y en ella estaba descargando por su cara, pasaron unos minutos antes de que bajara el cerdo que estaba atendiendo, cuando bajo ella me dijo los cerdos hacen 2 descargas le dije que si, uno era el semen y la otra un tipo de jalea que ocupan como tapón, le dije que tratara de sacarselo para que botaran el semen del cerdo pero no podía porque ya se le habia subido otro cuando por fin los cerdos nos terminaron de atender era de noche, le dije a Carla que fuéramos al estero a quitarnos los tapones que teníamos, ya que cada vez que nos montaba un cerdo empujabamos el semen del anterior aunque no todo, así no terminamos hinchadas de semen, estábamos bañándonos cuando aparece un viejito de unos 80 años y nos dice que van a tenerlo que hacer feliz como a los cerdos, nosotras nos quedamos mirando y antes que le dijieramos algo, nos digo las ví como se ...

... dejaban coger por cerdos zorritas, si no quieren que les cuente a nadie van a tener que hacerme el favor, yo le dije usted está avanzando de edad a usted ni se le para, cuando el viejo se baja el pantalón y vemos su miembro erecto, era grande de unos 18 a 20 cm le dije bueno espero que esté preparado, salí del agua mientras mi amiga aún seguía en en agua, me acerque a el abrazándolo pero mi entre pierna alejado de su pene, le dije que lo iba agarrar para ponerlo en mi vagina pero solamente abrí mis piernas y dejé que su pene acariciara los labios de mi vagina, cuando siento eso el empezó a moverse como loco haciendome tener un orgasmo, cuando terminó el viejito lanzando su leche quedo feliz, creo que eso a estado lo más cerca de una vagina sin penetrar, le dije a mi amiga que nos fuéramos, fuimos a buscar nuestra ropa donde estaban los cerdos pero no estaban, así que nos fuimos desnudas a casa menos mal no había nadie al otro día fui a buscar nuestra ropa los cerdos la tenían toda desparramada.

Esperen más aventuras que les contare