1. Aprendiendo a ser sumisa ll (la marca)


    Fecha: 28/08/2018, Categorías: Masturbación Autor: luci1330, Fuente: CuentoRelatos

    ... negra).
    
    Levante la cabeza sabía que tenía que ponérmelo, el me lo puso y junto con el también una correa de perro.
    
    -ahora eres oficialmente mi perra (dijo jalando fuertemente la correa haciéndome caer a unos pocos centímetros de su verga).
    
    El comenzó a conducir yo baje su cremallera y saque su enorme polla, la lamí y posteriormente comencé a mamársela, no la metía completa debido a que no quería tenerla hasta mi garganta, pero él me volvió a tomar del pelo y dijo:
    
    -cómetela toda puta tienes que aprender que siempre tiene que ser toda.
    
    De nuevo comenzó a manejarme sin dejarme respirar, de pronto me soltó y dijo:
    
    -masajea mis huevos y también chúpalos.
    
    Comencé a hacerlo sin chistar no quería que mi amo se molestara, lo hice hasta que llegamos a su casa, el tomo la correa y la jalo haciendo que yo saliera junto con él, no podía seguirle el paso en cuatro patas así que él me jalaba muy fuerte si la correa se tensaba, al cerrar la puerta inmediatamente comencé a desvestirme hasta quedar completamente desnuda frente a él de rodillas el aún tenía la correa en sus manos la cual jalo haciéndome quedar en 4 patas y dijo:
    
    -ahora ya tienes un collar de perra tendrás que comportarte como una, a partir de ahora quiero que, si quieras pedir permiso para hablar, des tres ladridos y cada vez que yo te lo ordene tienes que ladrar como la perra en celo que eres me entiendes.
    
    -¡guau!
    
    -eso es aprendes rápido puta, ven acá que te tengo que castigar por ser tan ramera ...
    ... (dijo jalando mi correa).
    
    -guau (dije caminando detrás de mi amo).
    
    Entramos a su habitación y quitándome la correa me aventó en la cama saco los vibradores de mi coño y de mi ano y saco del armario unas pinzas unidas por una cadena de metal y otra casi igual pero las pinzas eran diferentes, unas las coloco en cada uno de mis pezones, estaban muy apretados y no pude evitar soltar un quejido
    
    -si ya sé que duela, pero eso te ganas por ser tan zorra, no te pudiste aguantar un orgasmo en el salón he, querías que todos vieran lo puta que eres he, querías que alguno de esos imbéciles te clavara su verga verdad (dijo apretando cada vez más las pinzas).
    
    -¡Guau! ¡Guau! ¡Guau!
    
    -si putita tienes permiso de hablar.
    
    -amo perdóneme por ser tan puta no puedo evitarlo, pero la única verga que quiero es la suya amo yo aria lo que sea por su verga (dije tratando de aguantarme el dolor).
    
    -no tienes mi perdón, guarra, si quieres mi perdón vas a tener que ganártelo con sangre (dijo desabrochándose el cinturón).
    
    Se bajó los pantalones y dejo ver su vergeta erecta apuntando hacia mí, se acercó y de manera violenta metió su enorme verga dentro de mi coño perfectamente lubricado, comencé a gemir sin parar, pero el jalo la cadena lastimando mis pezones y dijo:
    
    -no ladra perrita, ladra.
    
    -¡Guaaau! ¡Gu... Haaa... Haaa guaaau! Mmm... Haaa... Haaa... Haaa... ¡Guau! ¡Guau!
    
    -eso es zorra ahora dime putita que eres (dijo embistiendo más fuerte).
    
    -ss... Soy... Soy una pe... ...