Marido con super cuernos - Relatos Eróticos

Marido con super cuernos

... en tu linda panochita (vulva) si entra mi herramienta y se acomodo entre mis piernas, me estremecí al sentir su verga recorrido mis labios vaginales los estaba impregnando de su liquido que ya brotaba en abundancia y luego empujo, auch, auch, ya, ya entro al cabeza dije espera, espera un poco y se detuvo y repuesta de la primera impresión algo dolorosa dije ya, ya puedes meter más y comenzó a empujar, auch, auch no pares sigue, sigue, auch, auch espera le dije jadeando, ya, ya puedes meter algo mas y entre espera y dale más y mis auch, auch le tomo más de veinte minutos enterrarme toda la verga y con sus rítmicos bombeos tuve un estimulo adicional al sentir como sus enormes bolas golpeteaban mis palpitantes nalgas y por primera vez en pocos minutos de bombeo tuve mi primer y verdadero orgasmo y fue tan intenso que por un instante quede completamente desfallecida pero como el aun no terminaba y continuaba con su enorme verga dentro de mi reanudo sus movimientos una vez ya repuesta, a pocos minutos otro gran orgasmo al que se encadenaron no sé cuantos más y lo último que recuerdo fue sentir su enorme verga haciendo precio en mi útero donde descargo toda su leche

No tengo idea del tiempo que ...

... permanecí inconsciente pero al despertar sentía un enorme dolor en la vulva pero a pesar de ello quería mas verga ya el camino estaba libre y una segunda vez no sería igual de dolorosa así que tome su flácida verga y comencé a chuparla y así flácida si pude meter en mi boca toda su enorme cabeza, niña, niña hermosa eres fantástica deja que te diga que eres la primer mujer que se traga mi verga entera me dijo mientras me iba ensartando y con ello llego otro gran ramillete de orgasmos de mi parte solo que esa vez no perdí el conocimiento y le pedí que se viniera sobre mi cuerpo para ver que tan intensa y abundante es su venida y guau potentes chorros de semen brotaron que llegaron hasta mi rostro y fue hasta ese momento que me percata que ya era de día y salí de ahí apresuradamente y ya era tan tarde que cuando llegue a casa ya se encontraba mi marido y lo primo que hizo fue preguntarme en donde había pasado la noche y yo actuando con gran cinismo le dije ha pues cogiendo con un hombre bien vergon y el lejos de indignarse soltó una tremenda carcajada para luego decir eso quisieras tontita

Si supiera que en realidad su tontita había sido penetrada con una verga de 28 cm. Se moriría de pena ha y pienso repetir