Conocí a mi putita y me cambió la vi
Fecha: 10/09/2018,
Categorías:
Anal
Voyerismo
Lesbianas
Autor: migueljuan140464, Fuente: xHamster
... pensaba que era yo quien controlaba todo aquello. Me miró de arriba abajo y arrodillándose entre mis piernas me lanzó: Papi, tu nenita tiene hambre y esta va a ser mi merienda…. Antes de darme cuenta había engullido todo mi miembro, hasta los huevos. Casi me falta el aire!!! Sentía su garganta con mi capullo, aquello no podía ser real, era una sensación inexplicable!!! Noté el calor de su lengua sobre mi polla y la presión de sus labios; lentamente empezó a subir sin dejar de apretar los labios, diossssssss que cosa mas buena!! Cuando llegó al final, jugueteo con su lengua sobre mi capullo y mirándome con cara de puta, con mirada de vicio, empezó de nuevo su viaje interminable hasta abajo, tragándose de nuevo mi polla. Su mano apretaba mis huevos. Pensé en que era el mejor momento para morir! Que mejor forma de dejar el mundo que sintiendo el mayor placer jamás soñado!!!!Pero reaccioné justo a tiempo, casi me corro en su boca, era tanto el placer que me daba que me había dejado ir y por poco ahí se acaba todo!!! La aparté como pude y ahora sí que la arrastré al baño. Necesitaba meterme bajo el agua, recuperar la cordura; quería gozar de todo su cuerpo, no podía acabar la mejor cita de mi vida con una simple mamada, aunque fuese la mamada del siglo!!!Nos metimos bajo el agua de la ducha muy pegaditos, mi polla seguía erguida, golpeteando entre sus piernas, ella con la cabeza echada hacia atrás para disfrutar del agua, acariciaba mi pecho mientras yo admiraba su belleza. Creo ...
... que empecé yo a enjabonar su cuerpo, aunque pronto fuimos los dos al unísono. Las caricias espumadas cubrían todos los rincones, aquello era muy erótico, nuestra excitación era palpable. Adoraba envolver sus senos intentando apretar sus duros pezones que se escurrían entre mis dedos. Me adentraba entre los montes de sus nalgas para alcanzar el valle prohibido que parecía contener un torrente propio. Pegaba mi cuerpo al suyo, ella parecía una serpiente contoneándose tal masajista oriental, sus manos apretaban mis nalgas para pegarme más ella. Deslizaba alguna de ellas entre nuestros cuerpos para apretar mi polla y restregarla entre sus nalgas, aquello me encendía; yo empujaba como queriéndola follar y ella jugaba a no dejarme entrar.La tome de las caderas y se apoyó en el tabique frontal. Apunté mi capullo a su coño y se la metí de golpe!!! Toma puta, que me estabas volviendo loco de deseo, ya no aguantaba más sin follarte!! No dijo nada, empezó a mover sus caderas como buena zorra que era, apretándome la polla con su vagina. Era ella que me follaba, yo era una simple polla que ella estaba usando. Me sentí muy guarro, quería follármela yo, hacerla sentir todo lo puta que me decía que era, por el chat. La detuve, sosteniendo sus caderas y casi en contra de mi voluntad saqué la polla de aquel sexo maravilloso y apunté a su ano. No querías ser mi puta? No deseabas que te llamase guarra? Ahora te voy a partir el culo puta, te lo voy a reventar por todas las pajas que me he hecho ...