MIS AVENTURAS I
Fecha: 13/09/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: XCITANTDLC, Fuente: SexoSinTabues
... esas ocasiones que una desearía sentir algo, que estuviera alguien allí, quien fuera, como fuera, que me calmara el deseo, pensé en la opción de masturbarme, pero no me gustaba la idea, yo deseaba a una persona real, carne y hueso, calor de otro cuerpo. Toda la noche la pasé así, medio dormida, medio despierta, hasta llegar al grado de sentirme enojada, ¿por qué no podría obtener el placer que deseaba?, ya casi para amanecer, logré quedarme dormida descansar, hasta que otra vez me desperté por un sueño, donde estaba por fin siendo penetrada por un chico desconocido durante el desayuno en algún restaurante, a la vista de todos. Me levanté, me di un buen baño, salí, tome de mi maleta una falda larga que traía, de esas que traen un fondo integrado por lo delgadas que son, tomé unas pequeñas tijeras y le corté por completo el fondo, de forma que cuando me la probé pude ver en el espejo que era bastante transparente, sobre todo a contraluz, luego, le recorte hasta convertirla en una mini, tomé mis zapatitos, me puse una tanguita parecida a la del día anterior y traté de vestirme igual, con la única diferencia de la falda, que esta vez trataba de llevar un mensaje muy claro: que ahora la que buscaba el placer era yo, no serían más los chicos. Una vez vestida, salí de la habitación y al bajar por las escaleras, donde pude comprobar bastante satisfecha, el efecto de la nueva mini, los ojos morbosos de un par de señores en el elevador, así que dejé fluir toda mi emoción, segura de ...
... las reacciones que provocaría. Nuevamente llame a un taxista, esta vez era un hombre como de unos 48 años, delgado que no hizo el menor esfuerzo para ocultar su morbo, yo caminé a la cajuela del auto, para que me permitiera guardar allí mi maletín, él de inmediato se bajó, lo abrió y me lo pidió, sin embargo yo misma lo deposité en la cajuela agachándome, dejando ver, después de eso, rápidamente caminé a la puerta, el chico la abrió y me subí abriendo las piernas para que pudiera verme. El conductor se subió al taxi y volteó a verme para saber a dónde nos dirigíamos, no pudo evitar bajar la mirada yo llevaba la falda muy arriba, pero actuando de la forma más natural, le di la dirección a la cual debía llevarme. Me llevó y al llegar me bajé del auto, él me dio mi maletín, le dirigí una sonrisa y le pedí que me esperara unos momentos, entré, era un edificio un poco viejo, pero se veía tranquilo, pasé al fondo de un pasillo, yo iba al segundo piso, subí la escalera, al llegar al número indicado toqué la puerta y esperé respuesta. El chico que me recibió aún estaba dormido, con unos shorts, sin playera, unas sandalias y todo despeinado, solamente se me quedó mirando sin comprender aun qué sucedía, pensando. Le pregunté si no me invitaría a pasar, que había venido a pedirle ayuda pero necesitaba platicar, me dijo que pasara, que iba a ponerse algo, a lo que le respondí que no había problema, le pregunté que si lo había despertado pero no me respondió nada, me imagino que aún no se ...