-
Estoy arrepentida (en parte)
Fecha: 08/01/2023, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: Emilia, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
A mis 24 anos nunca imaginé que iba a estar tan triste. Maia y yo, nos criamos juntas. Vecinas en un pueblo chico, hicimos juntas la primaria, la secundaria y miles de travesuras. Algunas un poco fuertes como acostarnos con un mismo chico por turnos y otras como algunos juegos de noche entre nosotras. A las 17 nos vinimos a esta ciudad por la facultad, nos adaptamos rápido y tenemos un lindo grupo. A los 20 Maia consiguió trabajo en un estudio contable y al poco entré a trabajar yo en una clínica. Nos mudamos a un departamento más lindo y cómodo y compartimos un año hermoso. Cuando Mais se puso de novia con uno de los dueños del estudio, conocí a Lautaro. Teníamos 22 años nosotras y Lau, tenía 28. Estaba feliz de que mi amiga, fuera dichosa y haya encontrado al amor de su vida. Al año cuando se casaron, fui la madrina. A esta altura creo que empezó todo. Algunas noches que se quedaba a dormir Lau en el departamento, los escuchaba cojer y parecían animales. Golpes de la cama contra la pared, gemidos y hasta algunos gritos, me prendían fuego de calentura. Había pensado mil cosas, me había tocado por ...
... horas, y fue peor poco antes de casarse, cuando una mañana lo encontré en la cocina solo con un slip que le marcaba un bulto increíble. Ya casados ellos se fueron a vivir a una casa, algo alejada pero muy linda y grande volvieron de su luna de miel y me fui a pasar un finde con ellos. El sábado por la noche se mataron cojiendo en su pieza y otra vez quede hirviendo pese a varias pajas que me hice. A la mañana siguiente otra vez me encontré con Lautaro en la cocina, solo que está vez tenía un short corto pegado al cuerpo y su pija estaba dura hacia un lado, marcando el total como si no tuviera nada puesto. Mi calentura, su mirada, mi amiga dormida hicieron lo necesario para que en pocos minutos yo estuviera probando esa poronga deliciosa. Me la comí entera. La disfruté Me regó las entrañas por ambos lados y termino por orinarme cuando se la chupe Después de cojerme por casi una hora, me llevo a mi cama ya que mis piernas no respondían. Me dormí con olor a leche, a pija y toda meada por el. Le probé el marido a mi hermana de la vida, a mi mejor y única amiga. Me había olvidado de todo por una pija.
«1»