Pagando al viejo de la tienda
Fecha: 09/01/2023,
Categorías:
Sexo con Maduras
Tus Relatos
Autor: Mary, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... aunque
esta vez no creía que se conformara con
tan poco. Cuando llegue al departamento,
él ya estaba esperándome en la
puerta. Me saludó muy amablemente
y pude notar que esa noche se había
perfumado y se había vestido
diferente que otras ocasiones.
Abrí la puerta y lo hice
pasar. Me dijo que además de los víveres,
había traído de cortesía
una botella de vino para que la tomáramos.
Traje dos copas hasta la sala y
bebimos vino, mientras conversábamos.
Extrajo de su saco un CD que me
pidió que pusiera en mi equipo de sonido
y era de música lenta. Me
pidió que bailáramos y mientras lo hacíamos
me comenzó a agarrar las
nalgas, levantando mi falda diciéndome que
tenia una piel muy suave. El toqueteo
y el vino me comenzaban a
excitar y empecé a ver el
tendero con ojos diferentes, mientras pensaba
que me dejaría hacer para
darle el placer que tanto quería.
En vista que yo no oponía
resistencia, metió sus dedos debajo de mis
braguitas y me jalaba hacia él,
haciéndome sentir su pene por debajo
del pantalón. Me besaba
el cuello y empezó a quitarme la blusa y a
bajar el cierre de mi falda. Él
por su cuenta también se desabrochaba
el pantalón, y así
con mi falda y su pantalón en el piso, seguíamos
bailando pegados. Subió
sus manos por mi espalda y me desabrochó el
sujetador. Tomo mis senos con ambas
manos y los chupó alternadamente
dejando su boca un buen rato en
mis pezones.
En un momento se separó de
mí y se terminó de quitar la ropa, ...
... mientras
yo me quedaba solo vestida con
mis braguitas y mis medias de nylon.
Se acercó nuevamente a mí
y metió su mano en medio de mis piernas,
masajeándome el chocho con
fuerza. Me dijo que me iba a comer enterita
y se arrodilló ante mí,
para bajarme las braguitas. Una vez que me quedé
sin ellas empezó a lamerme
el coño, y debo decir que el contacto con su
lengua húmeda consiguió
calentarme. Luego que me lamió, me pidió que le
chupe la verga, así que
el se puso de pie y yo me arrodillé. Me tomó
de la cabeza y me metió
su verga en mi boca.
Hizo que se la chupara un buen rato,
pero por más que hice no logre que
eyaculara y luego me recostó
sobre el sillón y empezó a culearme,
chupando mis tetas mientras lo
hacía. Sus dedos se clavaban en mis
nalgas, y yo movía mis caderas
para hacer que se vaceara de una vez,
pero el tendero estaba dispuesto
a que le pagara todo con la montada
que me estaba dando. Luego hizo
que me pusiera en cuatro patas sobre
el sillón, y así
con el culo apuntando al techo, él me lamía el ano y
la chucha consiguiendo que mi ano
se dilate, para recibir su verga.
La tenía gruesa y empujándomela
poco a poco, llegó a meterla toda y
comenzó a bombearme por
detrás un buen rato con fuerza, hasta que soltó
su semen dentro de mi recto. Sacó
su verga y yo sentía que por el ano
me chorreaba la leche de su descarga.
Me agradeció por la noche
tan fantástica que le había dado, y me dijo
que la deuda había quedado
saldada, y ...