El día que me folle a mi mamá y a mi vecina religiosa - Relatos Eróticos

El día que me folle a mi mamá y a mi vecina religiosa

Hola por el momento mi nombre quedará en el anonimato pero soy un joven de 17 años y desde los 16 he querido tener relaciones con mi mamá, mi mamá es una persona de tez blanca, divorciada, algo gordita pero eso la hace buena un culo medio grande y unas tetas medianas.

Al principio trataba de humillar, le bajaba los pantalones, le tiraba el agua encima para que se marcara su ropa interior atraves de su ropa hasta llegue a manosearla, hasta que un día no se me hizo suficiente hacer todo eso yo quería más.

Así que un día por internet compré unas pastillas para dormír bastantes fuertes tenia planeado hacer a mi mamá esa noche mía, pero por x cosa del destino quiso darme más ese día.

En la noche le pregunté a mi mamá si tenía sed, me dijo que si, y me ofrecí a darle un vaso de refresco, tome dos pastillas las hice polvo y cuando estaba a punto de hecharlas en el refresco escucho el timbre de la puerta, era mi vecina una mujer casada de 40 años con 3 hijos pequeños y un matrimonio muy feliz, ella tenía unas tetas pequeñas pero un culo grande, aprovechando la ocasión mi mamá me pidió que también le sirviera un a vaso a ella y yo tampoco hiba a dejar ir la oportunidad.

Tome el otro baso y también le puse dos píldoras, se las di y me senté a hacerles platica, al pasar unos 30 minutos note como sus ojos empezaban a caerse y sus cuerpos relajarse, yo estaba muy nervioso ya está con la verga muy dura de pensar lo que hiba cuando se durmieran, me latía el corazón a mil por ...

... hora hasta que finalmente se durmieron.

Para comprobar que las pastillas hicieron efecto le di un cacheteando a mi mamá y no despertó, en ese momento sabía que era hora de actuar, empeze tocando un poco los pechos de mi mamá eran tan suaves y esponjosos, después le quite el top y el sostén para más cómodidad empeze a chuparlos y morderlos como si fuera un bebé, me saque la verga y empeze a darle cachetadas con ella diciendo " ahora sí me vas a conocer perra" empeze a acercar mi verga a sus labios podía sentir su respiración caliente sobre mi pene lo cual me hizo poner más duro, empeze a frotarlo en sus labios dando vueltas y pequeños golpecitos hasta que la metí entera dios era tan húmeda y caliente, una embestida tras otra, comencé a ir más rápido y más a fondo tanto así que creo que llegó un punto dónde mi mamá no podía respirar, al terminar baje hacia su trasero lleva unos leggins ajustados, recargue mi cara sobre culo era como estar en dos grandes bollos, fui bajando sus leggins hasta llegar a su culo, dios era el ano más hermoso que había visto le di una buena respirada y la verdad olía un poco mal pero no me importo por lo que hice después fue meter mi lengua en su ano, no paraba de penetrar su ano con mi lengua le di una limpieza profunda.

Ahora venía la mejor parte dirigí mi pene a sus enormes glúteos y comenze a frotarlo lento y cada vez más acercandome a su ano, me costó un poco hacerlo entrar ya que estaba muy apretado, pero cuando entro uffff sentía como si ...