Ya no fue con mi amiga Caro, pero si con Carlos y su hermano
Fecha: 18/09/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: fernandacarolinategrel, Fuente: SexoSinTabues
... Ahora resulta que hasta quieren salir conmigo, es increíble esta experiencia, de haber sabido hubiera salido como Fabiola desde antes, y no hubiera ido a perder con Gerardo ni con un viejito desconocido en el camión, por lo menos Victor se veía más educado y limpio en fin, ya veré que pasa, baje del vagón y camine hacia las escaleras que bajan en dirección a taxqueña y ya sabía que iba comprarme una peluca a una calle de la catedral, estaba emocionada, sentía miradas por todos lados de hombres. Subí al metro y quede de pie, había mucha gente y entre con trabajo, quede de frente a la puerta de salida pero con una señora frente a mí, atrás de mí un señor que sentí su miembro pegado a mí y por si fuera poco su respiración junto a mi oreja, solo me moví un poco para no quedar mis pompis exactamente en su miembro, era fácil, pero no tanto jajajajaja. Obvio no dije nada, después de todo me gustaba estar en esa situación. Sentí como bajo su mano por su abdomen rosándome mi espalda, bajo un poco más su mano y roso mis pompis, no dije nada, solo baje mi cabeza. Levante mi cabeza y mire de frente al espejo, solo vi sus ojos con lujuria, no dije ni hice nada. Llegando a la siguiente estación solo me muevo disimuladamente para evitar su mano que seguía donde mismo, pero ahora quito su mano y sentí su miembro ya duro y pegado a mí. No dije nada, solo baje mi cabeza y pensé, esto es lo que cada mujer sufre en la calle, en el metro, es increíble exista gente así. Me moví para evitar su ...
... miembro, pero voltee a verlo a los ojos, solo bajo la mirada y se movió también. Llegue a la estación Zócalo y baje, feliz de salir de esa situación que en vez de agradarme me molesto. Salí del metro y camine hacia la catedral, di vuelta y llegue al castillo de la fantasía, una señorita muy amable me pregunto si podía ayudarme en algo. Fabiola: si, busco una peluca, llevaba una foto en mi celular y se la mostré. Señorita: ha ok. Si déjame buscar Fabiola: gracias De rato llego con dos una negra y otra como roja pero no tan fuerte, más bien color borgoña Fabiola: ¿si me quedaran? Señorita: yo creo que sí, puedes medírtela si gustas. Como yo Fabiola iba a probarme una peluca, tendría que levantarme el cabello y obvio se vería mi cara de niño. Fabiola: no, así está bien, me llevo la negra, ¿qué precio tiene? La señorita me dice el precio y accedí. Fabiola: ¿puedo pagar con tarjeta? Señorita: si claro, ¿solo la negra verdad? Fabiola: si por favor Entrego mi tarjeta, afortunadamente no aparece mi nombre y solo puse mi nip para pagar. Me sentí muy nerviosa, mis manos temblaban, si había comprado peluca y ropa pero nunca vestida como Fabiola, fue emocionante. Para entonces ya tenía hambre, pues no había desayunado. Pregunte a la señorita que me atendió donde había un McDonald’s, me explico y fui para allá, llegue y pedí una hamburguesa con todo y fui a una mesa y comí, como desesperada, me sentía algo excitada. Termine, me levante mi charola y la lleve a la basura, fui al baño de damas ...