Descubrí a mi tía - Relatos Eróticos

Descubrí a mi tía

... a su cuello y oía cómo suspiraba. Con mi otra mano me desabroché el pantalón y saqué mi pene, mi tía me lo vio y quedó pasmada y me dijo sobrino que grande la tienes, me la comenzó a masturbar deseosa de más. Con todo lo que estaba pasando, nos habíamos olvidado que estábamos en la calle, así que le dije: tía, estamos cerca de un hotel, porque no ir a ese hotel y hacer que todo esto fluya, ella accedió y nos dirigimos al hotel. Yo estaba nervioso, ya que iba ser mi primera vez, ya que como indiqué líneas arribas, mi familia siempre fue muy conservadora. Entramos al cuarto y mi tía me empezó a besar, besaba muy rico, me lamía el cuello y me susurraba al oído, me voy a comer esa verga, yo ya estaba full pero no sabía que hacer, no tenía la experiencia necesaria, mi tía me bajo el cierre y me bajo el pantalón, saco mi pene del bóxer y comenzó a lamer el glande, pasaba su lengua en círculos y era algo que me gustaba mucho, era excitante ver cómo de a pocos se metía mi pene y me miraba al hacerlo, cuando se lo sacaba me decía, que grande la tienes hijo, no me la voy a poder meter toda, diciendo eso cada vez lo hacía más rápido, yo sentía venirme, me gustaba verla cuando me la mamaba y el cómo trataba de metérsela toda. Escuchaba cómo se atoraba, pero igual así trataba de metérselo toda, estuvo un buen rato ahí, yo me saqué el polo, termine de sacarme las zapatillas y el pantalón.  Mi tía se sentó a la cama y me dijo ven, se echo y yo me tumbe en ella, la comencé a besar a morder ...

... sus labios, y poco a poco comencé a bajar a sus senos, lo desabroché y por fin tenía esos senos que tanto había fantaseado, los lamía y mordía con toda mi inexperiencia, pero escuchaba los gemidos de mi tía diciendo sigue hijito mío, que rico me la chupas, seguí bajando y desabroché su pantalón, se los saqué y encontré una lencería negra semi transparente que se hacía notar su rajita. Se notaba húmeda, baje hice a un lado su trusa y comencé a lamer su vagina, estaba súper mojada y gemia mas fuerte, para mi era sentir por primera vez un sabor diferente, muy rico que te envicia. Saque su lencería y seguía lamiendo, tenía su vagina bien depilada, metía toda mi lengua en su raja, mi tía gemía y me decía ya métela, vamos papi métela, subí y le di un beso. Le dije hoy serás mía, y ella me decía si papi, soy y seré tu tía perra, me encanta mucha tu verga, vamos métela, quiero probar esa rica verga, la tienes grande papi, la tienes más grande que tu tío, al decir eso me excito más y bajo y comienzo a rozar mi verga con su raja, le frotaba y se volvía loca, ya métela por favor, a la hora de introducir ella soltó un grito y dijo que rico papi, yo seguí metiéndola despacio y se sentía muy rico, se sentía caliente y apretado. Comencé a moverme y veía como mi tía se volvía loca, decía cosas obscenas para mi en aquella época, pero eran cosas que me gustaban y excitaban más, cada vez le daba más fuerte, a los minutos siento que su vagina se comprime y me bota, mi tía gemía y temblaba y de su ...