El manjar del albañil "el inicio"
Fecha: 19/09/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Cantantelove, Fuente: SexoSinTabues
... maestro. Después de agradecerle me voy hacia la puerta no sin antes darle un beso de despedida a mi querida hija y salgo hacia mi coche. En el transcurso del camino quiero hacer una llamada para avisar a mi trabajo que ya iba en camino pero no encontraba mi teléfono y comienzo angustiarme, comenzaba a pensar en donde deje mí celular y luego recordé que lo había dejado encima de un libro que estaba en él tocador, ya estaba a medio camino y pensaba si regresar me o seguir hasta mi trabajo, pero pensar que tal vez me llamarían… No me quedo de otra más que regresar me por él, habrá pasado como media hora desde que me fui, aunque llegue más rápido a mi casa, me estacione lo mejor que pude en el cajón y me dirijo a la puerta de la entrada principal, como el baño está por el pasillo no se escucha cuando abren la puerta, solo era cosa de entrar rápido y recoger mi celular, cuando abrí la puerta esperaba que mi pequeña viniera a saltar a mis brazos pero no había señales de ella por la sala, eso me confundió un poco ya que si se sentía aburrida sé sentaba en el sofá a ver las caricaturas que le gusta ver, en fin no le tome importancia, iba de camino a mi recamara sin notar nada, cuando me salí de la recamara ya para irme de nuevo y paso por el baño alcanzo a escuchar pequeños gemidos, me quede extrañado por un momento pensé que se debía al esfuerzo que hacia el maestro Beto, la puerta estaba cerrada pero no se me hizo raro, aun así los gemidos eran continuos y eso pico mi curiosidad ...
... al querer saber porque gemía tanto. Por la soteguela hay una venta la cual da hacia el baño así que con cautela me dirigí hacia allá. Cuando llegue los gemidos comenzaron a escucharse mejor, tome el banco que estaba ahí y con mucho cuidado para que no me viera me subí para observar. Pude ver la figura del maestro pero se movía de adelante y hacia atrás, por la posición en la que me encontraba no podía ver más, mientras se oía los gemidos del maestro. --Maestro Beto: aaaaaa…. siiiiii…. mmmmmm Sin poder ver más me baje del banco y puse toda mi atención para escuchar con más detalle, cuando pude notar aunque con menos potencia unos gemidos agudos. - Segunda presencia: aaaaa!. aaaaaa, hay…. Esa voz la reconocí, era la de mi hija Laila, por un momento pensé que estaba cargando algún objeto pesado para ayudarle al maestro pero recordé los extraños movimientos que él hacía, disponiéndome a observar lo que pasaba acomode el banco para tener una mejor visión, cuando me trepe no podía creer lo que vi. El maestro Beto estaba penetrando a mi hija, tenía los pantalones hasta él piso y se movía rítmica mente, mi hija estaba empinada apoyándose en la tapa del escusado, su vestido estaba alzado su dobles llegaba a la altura de su caderita y sus pantys estaban en sus rodillas. Me sorprendió tanto que no sabía qué hacer, mientras seguía el golpeteo de sus glúteos contra las nalgas de mi hija. Entonces el morbo comenzó a invadirme y entonces decidí seguir mirando, el maestro seguía penetrando a ...