La isla de los placeres mortales (Enter the Dame) En 120.0
Fecha: 20/09/2018,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... peticiones que le hiso a la complaciente Rouge.
-Siendo yo partidaria de estos juegos con brutales desenlaces y bisexual, agregó Ebba,
cuando se trata de sexo duro, prefiero compartirlo con mujeres, y en este caso Rouge me
había excitado totalmente, revelándome esa noche, lo más siniestro y malvado de su
naturaleza convirtiéndome desde entonces en su compañera y amante hasta hace poco tiempo, pero ahora, ya no me atrae y necesito otra hembra que me entusiasme y me satisfaga, creo que me entiendesmamita.
-Amiga mía dime ¿Que pasó luego con la loca, fue su final o se recobró, le preguntó Paula.
-La verdad es que después de aquella noche no volví a verla más, contestó Ebba, aunque
no creo que haya sobrevivido a esa clase de castigo que sabía administrar Rouge, por lo que se
jactaba diciendo que sus rivales tenían su último combate cuando se enfrentaban a ella.
Paula no tuvo que afanarse mucho para conseguir que Ebba continuara con esta historia.
-Rouge aunque un poco decepcionada, recibió un bono extra por parte del generoso tipo,
creo que ella quedó herida en su vanidad, agregó Ebba, al no lograr excitarlo suficientemente
con su presentación, este al parecer exigía más para ser entusiasmado, según me confidenció
ella más tarde, prefiriendo alejarse del salón conversando animadamente con el turco Osman,
antes de disfrutar las especiales atenciones de Rouge.
-Entiendo, por lo que hasta ahora me has contado; que lo usual, y la razón de ...
... estas previas
sirven para estimularse con la vencedora asesina, quien se expone frente ellos para que mas
tarde soliciten sus especiales oficios a fin de que estos consigan consumar sus ansiedades,
pero este individuo no requirió sus servicios, al menos, es como entiendo el relato que tú me
has contado hasta ahora, ¿No es así?, le dijo la morena.
-Exactamente, como tú lo dices, le confirmó Ebba, Rouge debía descargar toda esa lujuria
salvaje para terminar de gozar plenamente, fue entonces cuando me le ofrecí para satisfacer
todos sus caprichos, iniciando este vinculo con ella, satisfaciéndola en toda clase de sufridos
castigos, los que te aseguro soporté muy a gusto, me había enardecido a tal punto, que sentía
imperiosamente la inclinación por cambiar mi habitual rol, sentí incontrolables deseos de ser
la parte pasiva y disfrutar ser castigada por la sádica e insatisfecha Rouge, en lo cual esta era
una experta en este tipo de relaciones tortuosas.
-Siempre me consideré solo una sádica, mas ahora, quería ser sometida, había hallado a la
mujer que me hiciera sentir su sirvienta y esclava, deseaba satisfacerla, complacerle todos sus
caprichos y ahora que el sudamericano la había rehusado, este era el momento ideal en que
tenía que insinuármele.
Paula la interrumpió preguntando por este hombre, más que todo por conocer su nombre,
el que podría tener alguna relación más íntima en esta situación pensó, insistiendo en porqué
no ...