Iba abrir una cuenta de banco y le abrí las piernas. - Relatos Eróticos

Iba abrir una cuenta de banco y le abrí las piernas.

un martes en la mañana tenía que ir al banco para aperturar una cuenta extra a la que tenía, ya tenía un ejecutivo que siempre me  atendía, era un hombre en sus 30's guapo, con barba de candado, alto, delgado, cabello corto pero chino, labios carnosos y una mirada tan penetrante que no podía evitar ponerme nerviosa al hablarle. 
ese día en cuestión era primavera y yo llevaba un vestido en escote de color lila que me llegaba arriba de la rodilla unos botines con tacón grueso y de bajo unas bragas de encaje que hacían juego con mi sostén igual de encaje.
al llegar al banco estaba ansiosa en pasar ya que tenía prisa ya que iría a desayunar con mi esposo, casi al ser mi turno levantar la vista veo que él ya estaba ahí esperándome con una sonrisa de ensueño como siempre me recibía. Me pasó a su cubículo el cuál era el último del pasillo cerro la puerta como de costumbre y le invito a sentar, no podía con lo guapo que se veía con su camisa blanca que estaba un poco desabotonada y se podia ver parte de tu pecho, además, unos pantalones color negro que le ajustaban tan bien. 
al hablar con el no podía ser coqueta y tocaba mi cabello y mojaba mis labios para disimular lo nerviosa que él le ponía me empezó a explicar algunas cosas del banco y al acercarme unos papeles su mano y la mía rosaron ligeramente lo cual bastó para ponernos nerviosos, no pude evitar sentir como empezaba a mojarme al saber que estábamos solos y la puerta cerrada pero al final sabíamos que había mas gente y ...

... eso empezó a crear una atmósfera muy excitante entre él y yo.
Conforme más me hablaba no podía disimular que veía mi escote y mis muy pronunciadas tetas que se marcaban muy bien en mi vestido al acercarme una pluma se cayó al piso lo cual hizo que se levantará en ese momento no pude abrir mis piernas y subir mi vestido de manera sutil cuando él se encontraba de bajo del escritorio.

al levantarse no pudo disimular su cara de nervios y lo rojo que se puso en ese momento sentía como me mojaba más y más por esa situación podía parar de cruzar las piernas para apretar la vagina. 
al seguir en lo nuestro se sentía cada vez más la tensión sexual entre ambos yo solo quería que me subiera el vestido y metiera sus dedos en mi no podía evitar pensar en ello al divagar deje de escucharlo para cuando le pregunto algo yo respondí - si quiero.
y el solo se sonrojo. 
al casi terminar se levantó y nos despedimos como siempre en ese momento solo quería que me cogiera no podía con el calor que sentía y la humedad de mi vagina. 
en ese momento el destino la vida o el dios de las cogidas tuvo a qué se me cayera mi bolsa a lo cual estando el atrás mío me agache a levantar mi bolsa y al estar el atrás mío mis nalgas terminaron rosando con él... mi gran sorpresa fue sentir la gran erección que el ya tenía no pida creer que estaba pasando me volví a agachar pero está vez al levantarme lo hice lento y arrimandole mi culo y moviendo al estar de pie sentí su mano en mi cabera pedarla a él su ...