CAMILA - RECORDANDO MIS HISTORIAS UNIVERSITARIAS - Relatos Eróticos

CAMILA - RECORDANDO MIS HISTORIAS UNIVERSITARIAS

Hola amigos, esta vez les traigo recuerdos de mi universidad. En esta etapa fue cuando menos aventuras tuve. O eran mis animales en casa o las pocas ocasiones que viajaba a mi pago y mis veteranos amantes se descargaban. Si es cierto que tuve algún que otro ocasional encuentro. Pero la realidad es que quería mantener mi vida sexual lo más separada posible de mis círculos, ya sea familiares, universitarios, amistades, etc.
Una de las excepciones que tuve, fue en mi segundo año, cuando conocí al novio de una compañera de estudio. Resulta que, en una salida de mujeres, ya un poco tomadas, ella confesó que, si bien estaba enamorada de su novio, le costaba tener relaciones con él por su gran verga y terminaba adolorida, es por eso que a pesar de ser jóvenes tenían poca actividad sexual. Y al ser su novio muy demandante con el sexo, ella tenía claro que seguramente conseguía mujeres por ahí para satisfacerse.
Me quedé con la intriga, y en otras charlas dí con el gimnasio donde entrenaba y me cambié para ahí. Pude observarlo, no era muy apuesto, pero con un físico trabajado y siempre usando ropa y tirando posturas para que se le note su gran rabo, que a simple vista ya era tentador. Era la forma que tenía para que las mujeres se le acerquen. Y que por supuesto no le fallaba, al punto de darse el lujo de elegir con quien estar.
Al segundo día que fui me reconoció y se acercó a mí para charlar, además que no disimule en mirarlo y tirarle una sonrisa. Con mi cuerpo bien trabajado ...

... y de grandes curvas, sabía que llamaría su atención, algo que mi compañera de estudio tampoco estaba tan bien dotada.
Lo cierto es que ese mismo día acordamos una cita. Fuí puntual a su casa, con todos mis agujeros listos para ser penetrados. En la misma sala de estar me quité el vestido sport que me cubría dejando al descubierto toda mi torneada figura. sin nada de ropa interior. Al ser más bajo que yo, puso su cara en mis pechos mientras apretaba contra el mi cuerpo presionando bien mis nalgas. Me empuja y quedo recostada en el mismo sofá, se abalanza como desesperado para chuparme la concha, que lo termina haciendo con torpeza, pero de la calentura igual lo disfrutaba.
Se levantó de golpe y en un par de movimientos super rápidos se quitó la remera y el short, dejando al descubierto su hermosa verga. Era todo lo que mi compañera dijo, largo y grueso, venoso, cabezón. Un cosquilleo se apoderó de mi culo, solo esa verga lo calmaría.
Me subió las piernas a sus hombros y me la metió empujando suavemente. Al notar la poca resistencia y lo mojada que estaba, empezó a bombear con fuerza mientras yo gemía de placer. De solo pensar que ese rabo estaría en mi culo me excitaba más, por lo que no costó que llegara a mi primer orgasmo. Al sentir que me había venido, me empezó a bombear con mas fuerza y me estaba volviendo loca, por lo que no aguante más y le pedí que me la metiera por el culo. En esa misma posición me la metió, lentamente y en cada movimiento mas profundo logrando ...