1. El Seminarista caliente II: Zuliban, el Chiapaneco vergón


    Fecha: 31/07/2017, Categorías: Gays Autor: Borgia85, Fuente: SexoSinTabues

    Ese hombre alto, moreno y fornido me cautivo desde que lo conocí, pero lo que siempre hacia imaginar innumerables fantasías a más de uno (y lo sigue haciendo) era su abultada verga. Esta es otra de mis historias en el seminario, por razones de discreción cambiare los nombres, lo llamare Zúliban y será porque por su tamaño me recuerda a Zúliban de Monster Inc (espero no arruinar la infancia de nadie ja, ja, ja) esto ocurrió a finales de octubre de hace dos años (2015) La primera vez que vi a Zúliban fueron tantas cosas las que llamaron mi atención, era alto como de 1.90, fornido, moreno, una blanca sonrisa y por supuesto esa verga que se le notaba a kilómetros, sobre todo cuando usaba short al jugar basquetbol, y bueno quiero también agregar que es de Chiapas y ya tenía experiencia con con uno o dos chiapanecos, que cojen muy bien y además tienen buena herramienta. Esto fue antes de entrar al seminario claro está. Pues iniciemos. Casi durante año y medio era frecuente su imagen en mi cabeza a la hora de jalármela en el baño, por más que trataba de acercarme, parecía que no le interesaba mi persona, ciertamente al lado de él yo parecía enano con mis 1.61 mts de alto, intente conseguir su número con algunos amigos de él, pero me fue imposible, lo busque en Facebook y tampoco hubo éxito, cuando llegábamos a encontrarnos en algún pasillo no pasaba del saludo ordinario o el llegar a coincidir en la mesa del comedor muy rara vez y ni siquiera era posible hablar sólo con él. Así ...
    ... paso este año y medio sin mayor novedad, pero por una u otra circunstancia un día casi a las 11 de la noche viendo las fotos de un amigo y compañero, vi que había etiquetada una persona que ciertamente el nombre no me era familiar, pero el apellido me parecía conocido, y al revisar más fotos que tenía publicadas y las etiquetas, sin quererlo y así como si nada, tenía ya su Facebook. Ni tardo ni perezoso le envié solicitud de amistad, la cual acepto casi de manera inmediata, todo esto fue desde una cuenta de Facebook que yo tenía en la cual no había fotos de mi rostro, solo paisajes y otras imágenes. Me envió un mensaje preguntando quien era, ya que se había percatado que teníamos algunos amigos en común pero que al no encontrar ninguna foto mía pues no sabía quién era, para fortuna mía durante el día nos habíamos encontrado en un pasillo, así que de ahí comencé por hacerle adivinar quién era, dándole pistas y después de un buen rato de pistas y entre una cosa y otra íbamos platicando algunos otros temas, supo quién era yo. Hubo un momento en que dejo de responder mis mensajes a lo cual deduje que se había quedado dormido, y efectivamente al día siguiente me dijo que se había quedado dormido. La verdad al siguiente día no lo podía creer, el hombre que le quitaba el sueño a más de un seminarista, lo tenía como amigo en Facebook y habíamos platicado cerca de dos horas la noche anterior. Este día por la noche le envié algunos mensajes saludando y tratando de hacer platica, me pidió ...
«1234...»