Deportes - Relatos Eróticos

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... adentro que sentía que me llenaba todo.
Me escuché gemir cuando sin dejar de cojerme paso su mano y agarró ni pija que estaba a reventar. Me empezó a hacer una paja muy intensa que casi me hacía gritar de placer.
Acabé tanto en varios chorros de leche que se esparcieron por el piso, que cuando me incliné un poco sentí que su pija empezaba a latir y soltar su acabada dentro mío...
Me quemaba la leche caliente en el culo y mi pija se sacudia descontrolada a cada metida suya.
Hicimos un coro de gemidos y sonidos al acabar casi juntos y me la dejo adentro hasta que se le aflojó y salió, mientras me acariciaba la espalda.
Cuando salió solté mucha leche por el culo. Sentía un vacío y un placer que me aflojaba las piernas. Apenas pude me di una nueva ducha, me cambié y nos fuimos.
Ninguno dijo nada de lo que había pasado.
Pero yo no me voy a olvidar más de la mejor cojida de mi vida.