1. La prima de mi amigo


    Fecha: 01/08/2017, Categorías: Gays Autor: Misterio GB, Fuente: CuentoRelatos

    ... el glande muy lentamente, seguido por el cuerpo de mi sexo hasta que llegó a los huevos y se los comía uno por uno. Luego se metió mi sexo en su boca y poco a poco se lo introducía en su boca y por dentro de su boca, su lengua jugaba y me acariciaba mi sexo que estaba a punto de expulsar su primer lefa. ¡Que rica felación! Nunca en mi vida me han hecho una cosa así, como lo hacía esta mujer. Y yo seguía sin entender. Solo sé que mi pene quería penetrarla.
    
    La cargué y la puse encima del escritorio. Ella ya se había desabotonado la blusa y se le veía su brasier y la mitad de sus pechos, pues yo le ayudé con el resto de botones y con el brasier. Y ver esos pechos rosados y esos pezones erectos que me excitaban, sin pensarlo le di una mamada sin parar. ¡Que ricos pechos! ¡Por Dios!
    
    Luego llegué hasta su vientre, bien plano y durito. Sin lugar a duda practica deporte y está como una Diosa. Le bajé su mini y vi ese hilito que tenía como prenda que protegía su más preciado tesoro y dejaba al descubierto parte de su sexo y a su vez se perdía entre su piel. Ya tenía su braga afuera y solo quedaba hacer lo propio; es decir, lo mismo que ella hizo con mi pene. Empecé a acariciar con mis manos y con mis dedos parte por parte, muy lentamente y después de un suspiro saqué mi lengua y empecé a recorrer cada parte de su sexo, de su ...
    ... vagina, de su clítoris, de su pelvis, de su trasero, de sus muslos, etc.
    
    Una vez que ella estaba bien húmeda y mi pene daba señales de sus primeros lefazos. Ambos caídos en la lascivia. Proseguí a rozar mi falo con su sexo, y sentía como se convulsionaba y estallaba en placer y deseo. Era momento de penetrar su vagina, rosadita, depilada, tierna, suave y muy húmeda. Fue el momento en que penetré mi pene en su vagina y fue el clímax de los más delicioso y rico que mi sexo y yo habíamos probado.
    
    Que mejor antesala para un San Valentín en el sur con mi enamorada; que tirarme a la prima de mi amigo. Después de un par de horas de full sexo, de diferentes posiciones, se pone encima mío, coge mi pene y se lo mete por su culito selladito y apretadito. Bien despacio y empieza a gemir y gemir como si nunca hubiese sentido un pene entre su culo. Y mi falo y yo éramos los más felices.
    
    Al cabo de un rato ella estaba vestida y yo también satisfechos por lo sucedido. Y yo le dije:
    
    —Ahora, hablando en serio ¿Cuánto te debo por lo que has hecho? (refiriéndome al descanso medico).
    
    Ella me dijo:
    
    —ya está pagado —me quiño el ojo y me sonrió.
    
    Salí de ese lugar a regañadientes. Ella por la ventana me arrojó un papel.
    
    —Toma es para ti.
    
    Era el numero para ubicarla y decía “llámame, quiero que rompas mi culito de nuevo.” 
«12»