JUAN - Relatos Eróticos

JUAN

JUAN Hola mi nombre es Juan y siempre he tenido claro que las mujeres vinieron a mí por ser un caballo en celo, por decirlo de alguna manera tuve varias mujeres hasta encontrarme con Adela. La cual la tengo ahora mismo en mi cama jodiendola y metiendo mi polla en su coño. Según ella está a punto de correrse Pero mi serenidad la pasó yo por mis huevos. Y es que haga lo que haga no se me acaba la cuerda. Ya termine no puedo más le dije a Adela. Espera quiero otro me dijo. Cuando nos juntamos jamás se imaginó ella que yo fuera un caballo de energía. Quiero otro decía ella, tengo muchas ganas Lo siento estoy seco dije yo. Pero alce mi polla y fui a por un cuarto. Y para colmo tenía la presión alta y los nervios a flor de piel A que rico decía Adela Y yo le chille hija de puta… No lo vas a creer dijo ella pero todavía estoy caliente Mientras la follaba dencima de mí Yo no podía aguantar su ritmo y le pedí sacarla después de correrme por cuarta vez. Y sacando un vibrador del cajón se lo metió en el coño y dijo Pues yo no me quedo sin las ganas, menos mal que compre pilas nuevas. Terminado ella se durmió conmigo Y al próximo día a las siete de la madruga dijo Es hora de levantarse, levántate y ves a ducharte Desde que vivía con ella me sentía muy jodido. Y notaba como poco a poco todo iva mal. Te echo el desayuno y no has terminado de ducharte Como dije yo era un caballo en lo que se refiere al sexo, pero ella era una mandona Entonces me vestí y desayune cuando me fui no dije nada ...

... Al entrar en la oficina me esperaba mi secretaria Laura me dio unos papeles y me dijo esto hay que firmarlo ya se deben entregar hoy mismo. Yo estuve mirando papeles y revisando cuentas y a las once de la mañana como siempre fui a almorzar con mi secretaria. Hay desconectaba y hablábamos de todo un poco. Por ejemplo sabía que era soltera y que no había estado con muchos hombres, pues era chica que era muy de su casa ella, no solía salir mucho. Y vivía sola Yo escuchándola pensaba en Adela, estaba con ella pero no me gustaba ni su genio, ni que me mandara yo creo que era más porque nos entendíamos en la cama. Luego después de almorzar fuimos al trabajo y salí a las seis como siempre, a la salida le dije a Laura si deseaba tomar algo, fuimos a un bar y hablando con ella se me hizo el tiempo corto Cuando nos dimos cuenta eran las nueve de la noche y ella me dijo. Quiere usted terminemos hoy o tomamos la última en mi casa. Al decir esto yo mire mi móvil y vi la hora, y le dije tomamos la última en tu casa. Entonces ella poniéndose la chaqueta, diré que iba vestida con mini falda roja, chaqueta roja y camisa blanca y unos zapatos rojos. Como decía se puso yo chaqueta y saliendo a la calle los dos ella cogió su coche y yo el mío y me dijo. Sígame Señor Juan. Yo la seguí y fuimos al centro de la ciudad, llegamos a una barriada de pijos y entramos al garaje y al subir a la casa le dije vives aquí. Y ella contesto. Si vivo aquí mi padre me compro el piso y luego me lo amueblo. Pero ...