Sofia - Relatos Eróticos

Sofia

Con un Compañero de trabajo nos fuimos haciendo amigos. Atilio es un buen amigo y está casado con Sofía. comenzando mi relación con Nuria, nos juntamos como parejas una vez al mes y salimos a ver una película, un recital, una obra de teatro y luego a cenar.
Estábamos.cruzando.mensajes para decidir dónde ir en el grupo que tenemos los cuatro, cuando Sofía propuso ir a bailar.
Nuria aceptó y nosotros también. El sábado a la tarde, Nuria se indispuso y con muchos dolores decidió no ir.
Quise desistir y me pidió que fuese igual.
Los tres fuimos y nos.divertiamos.mucho. Sofía estaba muy animada y reía sin parar, mi amigo ya habia tomado demasiado y pidió de irse, así que bajo protesta Sofía me pidió que maneje yo. Al salir del boliche, Atilio recibió el aire fresco y se descompuso. Cuando se sintió algo mejor lo subimos al auto y en el asiento de atrás se desmayó. Me costó demasiado hacerlo bajar y entrar a la casa. Entre los dos logramos sacarle la ropa y acostarlo, tanque estaba desmayado.
Sofia me invitó un café y acepté, así que fuimos a la cocina. mientras preparaba el café se sacó los zapatos, soltó el pelo y se sentó. La notaba inquieta y hablando me dijo que no me ofenda pero se quería sacar el vestido. Ofrecí dejarla ir a dormir pero se opuso y me pidió que me quedé.
Ella se desnudo prácticamente delante mío. Su corpiño no lograba contener sus tetas bien duras y la tanga apenas le cubría la concha y se le perdía entre las nalgas. Realmente está muy linda y así era ...

... una provocación.
Se paró fue a buscar dos vasos con vodka y volvió pidiendo que me saqué los zapatos porque quería bailar
Le dije que íbamos a despertar a Atilio, pero me dijo que sería sin música.
Me saqué los zapatos y me abrazo para bailar y mientras nos mobiamos lento y pegados, se las arreglo para desprender los botones de mi camisa y poner su cara en mi pecho.
Me pido que la acaricié y mientras le tocaba la espalda me iba calentando. Ella me empezó a besar el pecho y el cuello, pasando su lengua y yo ya estaba durísimo. Me empezó a soltar el cinturón y quise pararla, pero me dijo que me calle porque iba a despertar a su marido.
Me soltó el pantalón que cayó al piso y me lo saqué quedando con mi erección a la vista ya que asomó por la abertura del calzoncillo.
Empezamos a besarnos y tocarnos, y le fui chupando las tetas mientras ella acariaba mi pija. Se separó apenas y acomodó la pija en su concha apenas bajando el elástico de su bombacha.
En un movimiento suave se le fue adentro y me dió un beso profundo jugando con su lengua en mi boca, mientras le agarraba las nalgas y la empezaba a cojer con ganas.
En plena cojida se salió y se puso apoyada en la mesada de la cocina. Me pare detrás suyo y quise probar su ano pero me lo corrió y se lo puso en la concha.
Dame, dijo casi en susurro y apoyo la cabeza en sus brazos sobre la mesada.
La seguí bombeando y sentía que le salían los jugos de su concha haciendo que el ruido se oyera claro a cada metida.
Separó las ...