Si es sexo, nos gusta todo. - Relatos Eróticos

Si es sexo, nos gusta todo.

Me gusta que me vean, claro que casi siempre que me exhibo no solo caliento a otro y otros sino que me calienta a mí.
Es un placer que no puedo contarles pero si me ven, me van a creer que lo disfruto
Solo disfruto en vivo y directo. 
Tuve mucha suerte, tengo una pareja bisexual que también es fetichista y se calienta tanto como yo de jugar en público y terminar agotados y cubiertos de esos líquidos que nos echan los invitados.
Siempre lo hemos hecho en lugares cerrados y con gente que conocimos antes y los cuidados necesarios, pero todo se va intensificando y así llegamos a esto.
Pasamos a hacer dogging callejero y con desconocidos.
Salimos con el auto y vamos preparados para elegir algún lugar donde pueda haber gente que se anime. Solo una vez se sumó una mujer y otra oportunidad le pagamos a una travesti que fue increíble e inagotable
Les dejo la última historia que vivimos hace unos días.
Buscando encontramos en una ruta, un parador donde había varios camiones estacionados.
Nos desnudamos y nos chupamos hasta que estuvimos muy calientes, exitadísimos bajamos. Solo con calzado y dejando a la vista nuestras calenturas nos paseamos entre los camiones dejando que nos vean a su antojo.
Nos paramos delante de cada camión y haciendo flexiones mostramos los agujeros dispuestos para su uso.
Nos corrimos a un costado en el que hay unas mesitas con asiento de material, y mi pareja se sentó en la mesa con las piernas bien abiertas. Me senté en el banco de frente y empecé ...

... una mamada lenta e intensa 
El primero que se acercó, fue un hombre canoso, panzón y con la pija en la mano mientras la Sacudia pregunto
- Linda noche para una chupada de pija, no es cierto? Mientras hablaba soltó una meada y sacudió la pija.
- Si usted quiere... Respondí con voz sexy
Se acercó y ofreciendo una poronga mediana, se paró a un lado 
Se la empecé a chupar, mientras mi pareja le lamia los pezones.
Aguantó muy poco y acabo unos chorros que pude esquivar apenas.
Se iba el gordito y ya había dos más. Jóvenes y pijudos esperaban turno 
Mi pareja saltó al piso y con la rodilla en el piso se prendió a la pija más gorda. Del otro me ocupé yo y tenía una pija más larga y más fina que me atacaba la garganta.
En plena mamada, alcanzó a ver qué otro más se ponía atrás de mi pareja, mientras seguía chupando levantó su cadera y le apoyó la verga en el culo. Alcancé a escuchar su quejido pero no rechazo todo lo que le metían en el culo. Me volvió a la relaidad el calor de otra pija que buscaba ayudada por un dedo,la entrada que encontró y atravesó. Un necesitado que no paraba de darme a lo bruto. Primero acabó el que estaba chupando yo y lo siguió el pijudo.
Eso enloqueció más al que daba y justo que me metían otra pija en la boca, me lleno el culo y me soltó un poco más en la espalda. No podía quejarme porque me ahogaba el nuevo que estaba chupando.
Vi a mi pareja que se hacía una paja mientras le llenaban el culo.
El que yo mamaba ahora se pasó a mi culo y también ...