Ayudándola a mi tía abuela con sus calores en la noche - Relatos Eróticos

Ayudándola a mi tía abuela con sus calores en la noche

Llegué a la casa de mi tía abuela por decisión de mi mamá cuando supo lo difícil que la estaba pasando cuando descubrió que su esposo después de 30 años de felíz matrimonio empezó a sacar los pies del plato con una de sus amigas de su trabajo, era mucho más joven que su esposo.
Ella le contó a mí mamá llorando que su marido le hacía responsable sobre su infidelidad, al decirle que lo había abandonado en la intimidad y que él cómo hombre aún necesitaba sentir la pasión de una mujer en su cama y eran muchas las veces que cuando él quería tener sexo, ella le contestaba que ya no estaban para eso.
Mí mamá le dijo que muchas veces los hombres no entendían que ellas pasaban por cambios hormonales al llegar a la menopausia y no estaban tan felices y dispuestas cómo antes para llegar a la intimidad como ellos sí lo hacían, le aconsejó que debería de buscar ayuda con su ginecólogo.

Y el motivo que me fuera a vivir con ellos era que mí tía abuela Alexandra tenía en su casa una bodega que ella atendía a diario y ahora al tener que visitar a su ginecóloga más seguido, ella sola no iba a poder y necesitaba a una persona de su confianza, y ahí fue que mí mamá le dijo que al haber acabado la secundaria ahora estaba estudiando todo el día para ingresar a la universidad. 

- Hola Panchito, podrías ayudarme con la bodega ? Té daría un dinero de propina.. qué dices..?

Le dije que SI, igual podía estudiar en su casa cómo en la mía, cuando me vió su esposo sé alegró mucho y me dió un ...

... fuerte abrazo diciéndome que cada vez estaba más grande y ahora íbamos a ser dos hombres viendo en su casa los partidos de fútbol. Luego me enteraría que mí tía Consuelo no quería que su esposo sé enteré que ella iba a empezar ya su tratamiento con su ginecóloga y mejorar un poco su vida marital con su esposo.

Mí tía abuela me decía que no le diga así, que la hacía sentir más vieja sólo le diga TÍA,  durante varías semanas en las mañanas yo me quedaba en la bodega atendiendo al público y mi tía  lo hacía en las tardes. Una vez mí tía dejo un sobre de los resultados con su doctora en el mostrador, entonces  por curiosidad lo abrí, me enteré que le habían diagnosticado ya Trastorno del deseo sexual hipoactivo y luego lo volví a poner dónde lo dejó y mí tía ahora seguía al pie de la letra todo lo que le indicaba su doctora.

Estábamos en la bodega sacando las cuentas con mí tía , cuando sonó el teléfono de la casa ella contestó y le veía como sus ojos se pusieron rojos y sé le llenaron lágrimas. Cerramos la videh lo más rápido posible y fuimos rumbo al hospital, luego llegarían mis padres y otros familiares más, ahí me enteré que mi tío abuelo abusó de las pastillas azul ( Viagra) había sufrido un ataque al corazón. Luego regresó a la casa con la indicacion precisa de su doctor a seguir, a los 68 años él se enteró que sufría del corazón y tenía un marcapasos, sé le había acabado ya el tiempo de forzar a su corazón a los juegos del sexo y ahí empezaron los problemas mientras ...