Mi hermana, mi ama 5 - Relatos Eróticos

Mi hermana, mi ama 5

... amas.

-Tiraban fuerte de mi correa, hasta entrar a una habitación, la 689.

Empezaron a besarse y meterse mano, yo estaba flipando. Se quitaron las minifaldas y los tanguitas, tenían algo de pelo encina de sus coñitos, se apretaron los cuerpos entre ellas con las piernas abiertas, de un tirón de correa me colocaron entre sus piernas.

-Lámenos a las dos a la vez, mm.

Saqué la lengua y lamia todos los recovecos de sus coños, ellas gemían y se besaban, se clavaban las uñas en la espalda, una me agarró de la melena y me coloco solo en su coño.

-Ehh, la hemos pagado entre las dos, también merezco que me lama, decía la chica a quien de momento no lamía.

-Perdón cariño, de un tirón de pelo me aparto de su coño y me acerco al de la otra chica.

Una puso su pie en mi pecho y me echó al suelo, se sentaron en la cama y se quitaron los tops, mientras yo estaba de rodillas mirándolas.

-¿Qué puedo hacer por mis amas?

-Ves a ese cajón y encontraras un consolador doble, lámelo bien y llénalo de tus jugos.

Al encontrarlo empecé a escupir, a lamerlo, y al estar ya resbaladizo empecé a metérmelo por el coño, haciendo a un lado mi tanga y gimiendo tirada en el suelo. Cuando estuvo mojado, le di la vuelta y me metí la otra mitad. Se pusieron las dos a 4 patas juntando bien sus culos, esa pose la estaba memorizando para hacerla con Cris.

-Va, penétranos a las dos con eso.

Les metí un extremo en el coño de cada una, y empezaron a moverse haciendo chocar sus ...

... nalguitas tersas las unas con las otras. Yo estaba ahí mirando como una tonta sin saber qué hacer.

-¿Puedo hacer algo por vosotras?

Juntaron sus nalgas, y la más dominante me dijo que les lamiera el ano.

Tenían el uno a unos centímetros del otro, podía lamer los dos de una sola pasada, ellas gemían y se estremecían, oohh dios esa lengua vale millones.

-Gracias amas, ¿Queréis algo más? Haré lo que queráis, ni que sea humillante o sucio.

La chica más pequeña empezó a gritar diciendo que se corría, yo seguía lamiendo sus culos prietos y observaba como la primera chica inundaba el coño de la otra con sus flujos. Se saco el consolador si se tumbo en la cama jadeando. Mientras la otra chica me decía, va ahora contigo, me iba a poner a 4 patas pero ella me dijo, no tú en la boca. Yo penetraba a esa chica con mi boca, aunque eso me atragantara a ella le daba placer.

-Así puta, decía la mujer gimiendo mientras se corría y salpicaba mi cara.

Se saco el consolador, y las dos se echaron a reír al ver como de mi boca sobresalía una polla que se tambaleaba.

-Has dicho que harías lo que quisiéramos, empezaron a cuchichear entre ellas.

-Sí amas.

Me tumbaron en el suelo y se pusieron frente a frente, coño con coño, sobre mi cabeza, se iban a mear y lo sabía, abrí la boca.

-Mírala, mírala la muy puta, sabes que nos vamos a mear y lo disfrutas, jaja.

Un primer chorro cayó sobre mi cara del que intente beber todo lo que pude, luego los dos a la vez y finalmente solo ...