El maravilloso trasero de Avelina
Fecha: 24/12/2023,
Categorías:
Anal
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... tráfico en todo el centro.
Cuando llegué a recepción, había dos personas registrándose, por lo cual tardaron algunos minutos en atenderme, y fue por este motivo, que quise adelantar el registro en el hotel, porque siempre había gente en recepción, y más por las tardes, y cuando llegara con Avelina, ya no quería entretenerme, quería irme directo a la habitación; cuando fue mi turno, le di mi número de reservación a la recepcionista y pagué la estancia, me entregó la tarjeta de acceso, pero no entré a la habitación.
Habiendo terminado este pendiente, me fui de regreso al centro para pasar por mi chica, ya que me iba a tomar otros 20 minutos llegar por el denso tráfico, en el trayecto me detuve en una farmacia, en donde compre un lubricante vaginal y condones, cuando salía de la farmacia me llegó el mensaje de Avelina, diciéndome que ya había comprado la papelería, adjuntando la ubicación, y mientras metía el lubricante y los condones a mi maleta, le respondí diciéndole, que en unos 10 minutos llegaba por ella, me subí al auto y me dirigí a la ubicación que me había enviado.
Cuando llegué a la papelería donde ella había comprado, me estacioné en doble fila, ya que nunca hay lugar donde estacionarse en el centro, al bajarme del auto, vi a mi chica saliendo de una boutique que estaba a un lado de la papelería, estaba matando el tiempo ahí, me sonrió y me dijo,
-aquí están las cosas
, señalando en una parte del mostrador de la papelería, tomé la caja grande de hojas ...
... blancas, mientras que ella tomaba una bolsa grande con el resto de la compra, y metimos todo en la cajuela, prácticamente la cajuela iba llena.
Al subirnos al auto, le di un beso, notando como un tipo que estaba en la banqueta, se nos quedaba viendo, entonces le dije bromeando:
*Mira lo que provocas amor,
arrancándole una risa nerviosa, y mientras daba marcha al auto, me empezó a contar, que cuando la dejé en el centro, se dirigió a las tiendas que le había dicho, y al haber checado precios, decidió regresarse a comprar a esta tienda, y al ir caminando de regreso, un tipo le preguntó por una dirección, y ella le respondió que no sabía, que no era de la ciudad, y continuó caminando hacia la papelería, pero el tipo comenzó a seguirla, y empezó a decirle de cosas, que le mostraba la ciudad, que la invitaba a comer, que a donde iba y más, pero ella lo ignoró, hasta qué, al ir entrando en la papelería, el tipo entendió que no tenía oportunidad con ella, diciéndole una grosería.
Yo puse cara de extrañeza acompañada de una sonrisa, y le pregunté:
*Como que una grosería, ¿qué te dijo?
y me dice:
-Pues sí, porque yo él no lo conozco y por eso es una grosería.
Eso me provoco reírme y le dije:
*A ver, ¿cómo está eso?, me estás diciendo que es una grosería porque no lo conoces a él, pero si lo conocieras ¿entonces no sería grosería?
Y me dijo:
- Mmm, Pues sí, si yo lo conociera y nos tuviéramos confianza, pues quizá no lo tomaría como grosería.
*A ver, ...