1. La Beba, esposa pervertida, reprimida de sus deseos


    Fecha: 05/02/2024, Categorías: Hetero Autor: Bruno mágico, Fuente: CuentoRelatos

    Mi encuentro con la Beba
    
    Un día como todos al abrir mi Facebook y veo una solicitud de amistad de “La Beba”, se me hizo algo extraño pero sin embargo la acepté, “La beba es una mujer de 36 años, casada con 3 hijos, aparentemente feliz en su matrimonio, tal y como la mayoría de matrimonios del mundo, físicamente está con unas pocas libras demás, debe ser a consecuencia de sus hijos, pero en sí no está para nada mal, es la típica mujer que de soltera era la hembra más buena del colegio, de universidad, del barrio y de todo lado, su cuerpo era más que de modelo de actriz porno, la típica ”buenota” nalgas en forma abundante y redonditas, piernas gruesas y torneadas, cintura finita y firme, y tetas normales y paraditas, a eso acompañada con su costumbre de siempre vestirse sexy despampanante, nunca vulgar, de tal forma que siempre paraba el tráfico..!
    
    Ahora entienden porque mi sorpresa a pesar de que éramos amigos no cercanos pero siempre hubo miradas de coqueteo de parte y parte sin haber llegado a nada más, entonces de inmediato le acepté y comenzamos a conversar de la vida de cada uno, yo me mantuve muy discreto y contar mi vida que ni siquiera le conté que estar deparado de mi esposa, la conversación fluyó y cuando nos dimos cuenta estabas tratando temas de intimidades y deseos de cada uno, ella me contó que vivía con su esposo y que la relación estaba súper mal en el sentido sexual, que ella es muy caliente que gustaba de tener sexo a cada momento, que gusta de tener ...
    ... sexo duro, y que tiene muchas fantasías sexuales del mundo liberal creativo – swinger, su mayor frustración es que el esposo no compartía nada de aquello, es más casi ni siquiera la cogía, y no estaba de acuerdo en cumplirle sus fantasías, ella quería tener sexo con dos o tres hombres a la vez, quería sentir la adrenalina de sentir dos penes al mismo tiempo, de sentir algo diferente a lo que tiene en su hogar sin serle infiel a su pareja, pero eso él no lo entendía y NO estaba dispuesto a cumplírselo, en fin la Beba ya se había resignado a que con su esposo no obtendría satisfacción en ese sentido.
    
    Seguimos conversando de cosas triviales variadas, le comenté de mis experiencias liberales que había tenido con parejas y chicas, entonces como dijo ella “somos el uno para el otro” compartíamos mutuamente los deseos y fantasías sexuales, pasaron los días con conversaciones normales y calientes el uno del otro, ella se interesaba mucho en los detalles de los tríos que yo había hecho, que le comenté que cosas nomás les habíamos hecho a la chica que había estado con dos, tres, cuatro hombres, la invité a una fiesta liberal, y le encantó la idea, pero las cosas se dificultaron debido a la responsabilidad de sus hijos y la distancia por la fiesta es en otra ciudad a 4 horas de viaje. Ella me invitó a vernos un rato para charlar y ver que podía pasar entre nosotros, hasta que un día nos vimos en un sitio publico algo discreto, en un costado oscuro de la calle, a unos escasos 10 metros ...
«123»