-
Lo raro de este mundo (capítulo dos): Luis
Fecha: 22/04/2024, Categorías: Gays Autor: osazo21, Fuente: CuentoRelatos
... matrimonial de ellos dos sino tenían casi relación, claro que era algo ingenuo yo, porque en realidad Evelio sí singaba y Luis también, quizá cada uno por su lado o simplemente yo había asistido a un teatro orquestado por y para ellos mimos donde yo era o simple actor o decorado. No me molestaba el haber llegado a semejante conclusión, simplemente comprobaba que el mundo era más complejo de lo que pensaba y que la mentira, el engaño o la infidelidad era el pan nuestro de cada día. No se volvió a repetir aquel trío con ellos, seguí visitando a Luis, quedándome con mucha frecuencia en su casa y satisfaciendo su apetito sexual al igual que el mío. Singábamos ya sin experimentar, tengo que aceptar que me había acostumbrado a su pinga, a su grosor y que ya no costaba trabajo la penetración. Usábamos a veces crema pero ya se iba haciendo común la saliva, había leído en libros sobre sexología que el recto se adaptaba a un miembro y por lo tanto el acto sexual llegaba no ser violento. Era cierto, aunque supongo que ya me había adaptado a la manera de Luis y había cogido confianza en él. A Berto lo volví a ver un día que pasaba por su casa, me hizo entrar, su amigo no estaba y claro él quería fiesta. La infidelidad estaba a la orden del día. Pero como no era yo de nadie ni tenía pareja eso no me preocupaba. Ese día nos fuimos directo a la ducha, primero porque había calor y segundo porque le dije que no me había bañado y claro, él me invitó directo. Ya desnudos bajo el chorro ...
... de agua empezamos besándonos, acariciándonos. Berto estaba que parecía iba a explotar, su pinga estaba dura y la movía contrayendo sus músculos. Estuvimos jugueteando mucho tiempo, yo me arrodillaba y me comía su sexo, él después a mí, hasta que me dijo. —¡Quiero singarte ahora! Me hizo poner mis manos en la pared de la ducha, después me abrió los pies y empezó a meterme caña. Decía palabrotas, me llamaba maricón, puta, hembra; mi culo era tanto un chocho como un culo como un túnel o pozo. No me preocupaba por aquellos comentarios mientras no fueran ofensivos, era más me agradaba porque maricón lo era, puta lo había sido cuando pasé de macho en macho aunque sin ganar nada, hembra lo era por el rol que tenía con él y bueno, que mi culo fuera chocho o pozo, tampoco me preocupaba por el contrario me sentía bien. Cuando se vino, me preguntó si me iba a venir yo o no, como de costumbre empecé a hacerme la paja, pero aquí Berto me sorprendió pidiéndome que me lo singara. Eso hice, se encorvó y le metí caña, me lo singué bien hasta que me vine. No soy de los que habla mucho pero Berto seguía diciendo cosas, ahora él me decía que lo había hecho mujer, que ahora él era el maricón. Parecía una comedia pero lo principal es que ambos quedamos satisfechos. Esta nueva noticia llegó a oídos de William, en pueblo chiquito, ruido grande y más tratándose de ese cerrado mundo homosexual, donde la promiscuidad imperaba. Yo le dije que el de La Lisa me enseñó a coger culos también, se lo ...