-
Antonio, mi vecino favorito (Parte VI)
Fecha: 24/05/2024, Categorías: Lesbianas Autor: Ifigenia, Fuente: CuentoRelatos
... blasser y, además, abrir otro botón de mi camisa, en ese momento Carolina clavó su vista en mi escote descaradamente. -Hoy está haciendo muchísimo calor, ¿Cierto? -Demasiado. Dijo aun mirando mi escote. -Estoy que me quito toda la ropa. -Si quieres lo puede hacer, yo no tengo ningún problema- dijo sonriendo y mirándome por primera vez a la cara desde que había entrado- Es más, yo también me voy a quitar la chaqueta. Carolina es una chica linda, cómo de mi edad, más alta y corpulenta que yo pero con lindo cuerpo; con buen trasero aunque poco busto, de cabello ondulado cobrizo. Antonio me escribe: -Ja! Te dije que le gustabas, es hora de ser un poco más atrevida. -¿Es por el calor que no llevas brasier? Comenta Carolina rompiendo el silencio, así que decidí tomar esa pregunta cómo una oportunidad y ver qué se daba. -De hecho no, tuve un problema en el cajón de mi ropa interior y ahora toda está mojada. ¿Te puedo mostrar algo? -Si claro, lo que quieras. Me paro, me pongo frente a ella, doy media vuelta y me inclino. Mientras me subo la falta le digo: -Mira, me tocó ponerme estás medias manchadas y sucias. -Si. Dice ella tocando el interior del muslo derecho tímidamente. -Y eso no es lo peor- le digo mientras pongo mis manos al lado de cada una de mis nalgas abriéndolas- mira están rotas y no traigo ropa interior. Ella suspira un poco y va subiendo su mano por mi muslo pero la retira, enseguida me paro pero quitó otra botón de mi ...
... camisa y me voy a sentar. -Que mal- dice ella- me hubieras avisado y te hubiera prestado algo de ropa interior, tengo muy bonitas, cómo estás. Acto seguido se sube la falda y se baja las medias, está usando un tanga roja muy pequeña que se pierde entre sus enormes nalgas. Me inclino en mi escritorio haciendo que mis brazos presionen mis tetas y estás sobresalgan más por la abertura de mi camisa. -Si, tienes una ropa interior muy hermosa y sexy. -Bueno, aunque solo te podría prestar pantys, porque esas enormes tetas jamás cabrían en mis brasieres, de hecho me preguntaba si son reales. -Son totalmente reales- le digo tocándolas- si quieres lo puedes comprobar por ti misma. -Tendré que hacerlo porque no creo que sean naturales. Me levanto, me quito la camisa y me siento en el escritorio. Enseguida pone sus manos sobre mis tetas, las empieza a apretar y estrujar, quizás no me gusten las mujeres pero me encanta que me toquen las tetas y sus caricias me estaban calentando. Carolina, visiblemente agitada, dejo de tocarme los pechos. -¿Convencida? -No mucho, aún tengo dudas. Me dice sonriendo. -Bueno, yo no soy mentirosa y aquí las tienes para que no te quedes con dudas, un que sabes, ya a mí me dio curiosidad de saber cómo se sienten las tetas de otra mujer porque solo he tocado las mías. -Eso no es un problema, si quieres puedes tocar las mías mientras tocó las tuyas- comenta Carolina con picardía. Mientras ella se quita su blusa veo los ...