1. Me gusta que me vea el vecino


    Fecha: 30/06/2024, Categorías: Voyerismo Autor: macizorra cogelona, Fuente: CuentoRelatos

    ... Me acerqué la ropa y me empecé a vestir... me puse el brasiere negro de encaje, unas pantis que me quedaban a media nalga y me acosté con una pierna hacia arriba e introduje la media en mi pie y lentamente la fui deslizando, discretamente vi hacia la ventana del vecino y... ¡qué nervios! Él me estaba viendo.
    
    Seguí y deslicé la otra media en mi pierna derecha y me paré de la cama. Caminé hacia el espejo y de pasadita jalé el cortinero para abrirlas más. Ese muchacho despertó mi morbo y mi exhibicionismo.
    
    Me puse de frente hacia la ventana, me puse las zapatillas y haciéndome la que no veía me senté en la esquina de la cama y alcancé el dildo que tenía sobre el tocador.
    
    Volví a la cama y me puse de rodillas, hice a un lado mi panti e introduje el dildo con una mano, mientras hacía mi pelo a un lado.
    
    Lo metía y lo sacaba lentamente y mi vagina devoraba aquel juguetito en forma de plátano... poco a poco se fui llenando ese plátano de mis jugos.
    
    En eso, tocaron el timbre y tuve que ir a abrir. Mi amiguito había llegado.
    
    Lo saludé y le dije que pasara, me preguntó porqué estaba tan agitada y le contesté que me estaba masturbando. Él se río y luego me dijo: ¿Así que estás muy caliente mamacita? Le respondí ¿Tú qué crees?
    
    Ahorita lo arreglamos mami, déjame tomar un ...
    ... poco de agua. Claro bb. Acá te espero.
    
    Al llegar a mi cuarto, lo empecé a besar, a lamer sus labios y le bajé el pantalón. Le toqué el pene y sus bolas. Pero él aún no estaba listo.
    
    Me desabrochó el brasier y se tumbó en la cama, quedando encima de él y mis tetas al aire descubiertas. Me dijo quiero masturbarte putita. ¿Quieres? Le dije sí. Me acomodé e introdujo aquel plátano en mi coño mojado, lo hizo suavemente y me dijo: que rico te lo estás comiendo mamacita y lo empezó a hundir más, más fuerte y rápido hasta que me hizo gritar y sacudirme del placer.
    
    Mi amante ocasional se sentó en la cama y me empezó a chupar los pezones, a masajear las tetas y mamarme de lo más rico. Eso me provocó que volviera a correrme mientras gemía de tanto placer.
    
    Al recuperarme un poco, supuse que el vecino estaría viéndonos. Y así fue. Me bajé de la cama por el lado que daba a la ventana y ahí estaba observando.
    
    Pude verle su cara y... él ese chico estaba con mirada lujuriosa y por cierto era muy guapo.
    
    Mi vecino era alto, moreno, muy varonil y de facciones finas.
    
    Mañana les seguiré contando qué sucedió después.
    
    Con cariño Macizorra cogelona.
    
    Al recuperarme un poco, imaginé que aquel joven estaría viéndonos a través de ventana. Y así fue, el chico estaba observándonos. 
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