Una cita con mi psicóloga
Fecha: 31/07/2024,
Categorías:
Confesiones
Autor: johnsmith2347, Fuente: CuentoRelatos
En la consultoría de mi psicóloga:
-Me siento como bloqueado al acercarme a alguien que me gusta y termino mejor retirándome -Le dije a mi psicóloga.
Hay dos formas de tratar tu trastorno:
-Una es por medio de la terapia tradicional, donde yo te escucho y después de mucho tiempo ves resultados o mediante una terapia alternativa, que es mucho más eficaz y rápida, ya que una sesión de una hora, pero tiene un costo más elevado. -Me dijo de una manera muy formal.
-Me gustaría intentar la terapia alternativa -Le dije intrigado por saber de que se trataba.
-De acuerdo, pero hay dos reglas que debes de -Me respondió un poco nerviosa.
-¿Cuales? -Le pregunté.
-Primero, debes de saber que yo no salgo con mis pacientes por ningún motivo y segundo, la terapia solo se puede realizar una sola vez. Si estás de acuerdo, podemos proceder.
Al principio no entendí porque me dijo que no salía con pacientes, como si quisiera salir con ella, aunque he de reconocer que era muy guapa.
Me citó para el siguiente día, pero un poco más tarde de lo habitual y empezaba a oscurecer.
Me dirigió hacía un cuarto en la parte de atrás, en donde había una especie de camilla para acostarse.
-Antes de comenzar recuerda que esta terapia puede ser interrumpida en cualquier momento, solo debes decirme si algo no te gusta. Si no me dices nada, asumiré que esta todo bien y que deseas continuar -Me advirtió.
-Está bien -Le respondí.
-Cerraré la puerta para que puedas quitarte la ...
... ropa y recostarte, puedes taparte con esta toalla. -Me dijo.
-Si, está bien -Le respondí.
-Cuando estés recostado ponte esta venda sobre los ojos.
-De acuerdo -Volví a responderle.
Mientras me quitaba la ropa, no entendía que estaba ocurriendo, pero supuse que así era la terapia y que debía confiar en ella.
Minutos después, Vanessa, mi psicóloga entró y al ver que ya estaba acostado, comenzó a untarme suavemente una especie de aceite en mi pecho y mis hombros.
-Relájate, imagina que estas con una mujer que acabas de conocer. Imagina, que estás con ella a solas y ella desea pasarla bien contigo -Me dijo.
Mientras me imaginaba eso, ella seguía untándome aquel aceite por todo mi cuerpo hasta que retiro la toalla, dejándome totalmente desnudo.
No sabía que pensar en ese momento, pero hice lo que me pidió. Cerré los ojos y me relajé.
Noté que sus manos estaban cada vez más cerca de tocar mi pene, hasta que definitivamente comenzó a untarle también aquel aceite. Sentí muy agradable al sentir sus caricias.
-Imagina que estas con esa persona nueva que desea conocerte -Siguió diciéndome.
Mientras sus manos acariciaban mi pene erecto, comencé a comprender su terapia. Me estaba "desbloqueando" al hacerme sentir cómodo y seguro con sus caricias. Y en ese momento me parecía que estaba funcionando.
De pronto sentí algo muy distinto. Sentí el calor de su cuerpo y como frotaba sus senos en mi pene erecto. Sobra decir que era una sensación muy agradable para ...