Un suggar daddy y dos babys
Fecha: 10/08/2024,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: xMystic, Fuente: CuentoRelatos
Llegué como de costumbre, un domingo por la mañana a la casa de mi sugar daddy.
Nos llevamos 23 años de diferencia, pero sí que se mantiene en forma y sabe cómo complacerme.
Yo soy una chica de 26 años, latina, de estatura mediana con cabello castaño y ojos marrones. Tengo grandes senos y unas piernas gruesas con nalgas espectaculares. Él es un tipo americano de 49 años, robusto, alto y con un pene grande y grueso. (Grandes testículos también, por cierto).
Cuando entré a la casa de Tom, me percaté de que tenía compañía. Se trataba de Niki. Una amiga de Tom, como de mi edad. Una chica morena, cabello negro y alborotado, grandes senos y un culo enorme.
Ya la había conocido antes y nos habíamos llevado genial, así que la saludé con entusiasmo y enseguida me propuso tomar una cerveza.
Encantada asentí pues era un domingo muy muy muy caluroso.
Fueron pasando las horas mientras que nos divertíamos en la piscina, tomábamos cervezas, fumábamos porros y bailábamos al ritmo del reggaetón que estaba sonando cuando se me ocurrió proponer una ronda de shots.
— ¡Vamos a tomar unos shots!
Dije con emoción y ambos asintieron.
Así que fui a la cocina, preparé los shots de Tequila, limón, sal y me acerqué a ellos.
Brindamos y ufff! Sentí cómo el calor del tequila y el ácido del limón bajaban por mi garganta lentamente.
En ese instante noto como Tom se baja sus shorts playeros y deja salir su enorme erección. Niki y yo nos vemos a la cara por unos segundos ...
... y enseguida nos arrodillamos para darle una mamada en conjunto.
Los labios de Niki se apoderaron de las gigantes bolas de Tom mientras que yo me encargaba de succionar la cabezota de su pene. Hicimos esto por varios minutos, como 7 aproximadamente y luego nos intercambiamos.
Ella comenzó a lamer rápidamente su glande mientras que yo acariciaba con una mano sus bolas y con mi boca escupía toda la superficie.
— ¡Qué buenas chicas son ustedes! Sigan, sigan así.
Después de unos 20 minutos de sexo oral en conjunto, me levanté del piso y comencé a admirar cómo Niki estaba inspirada mamándole el pene a Tom y comencé a sentir celos.
Yo también deseaba un poco de placer!!
Así que me acerqué a ella, la levanté del suelo y le arranqué el bikini rosado que únicamente tapaba sus pezones y los empecé a lamer. Se le pusieron duros enseguida y comenzó a gemir bajito en mi oído.
— Ay mami que rico! Te gustan mis tetas grandes?
— Si mami me encantan, me fascina chuparlas mira como me las como.
Las agarré y las apreté para juntar sus pezones y morderlos suavemente mientras las masajeaba y estimulaba poco a poco. En ese momento, ella me despegó de su pecho y me arrebató mi bikini que era un poco más conservador.
Lo lanzó al piso y con sus dedo índice y pulgar me apretaba el pezón derecho mientras que con sus dientes me mordía el izquierdo.
A todas éstas, Tom se había sentado a observarnos y disfrutar del espectáculo. Jajaja.
Yo podía sentir como miles de ...