La extraña pareja
Fecha: 15/08/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Jtm1111, Fuente: CuentoRelatos
... mujer.
-Debo ir a entregar la pasta. Esa gente la espera.
-Quiero ir contigo.
-Ah no, a esto no.
-¿Por qué no?
-Porque son peligrosos.
-¿De verdad quieres que me quede aquí? Ni hablar.
-Sí, quiero que te quedes aquí. Y hazme caso en esto.
-No, tengo una idea. Cara voy, cruz te la chupo para volver a jugar.
-¿No piensas ceder en esto, verdad?
-No.
Tiró la moneda y besó a su esposo sin esperar a ver qué salía.
Era un tugurio, un establecimiento que daba pésimas sensaciones con solo mirarlo.
-Pero que ven mis ojos, es Tomás. Con mi dinero, supongo.
-Sí, integro.
-Bien, espero que no te moleste que lo cuente. ¿Y ella quién es?
-Ella es una larga historia.
-Soy su esposa.
-¿En serio?
-Sí - respondió Tomás.
-¿Y dónde la has sacado?
-De casa de sus padres. ¿Estamos en paz?
-Pues… estamos en paz.
-¿Puedo hacer una propuesta?
-Cariño, ¿Pero qué haces?
-No, no déjala hablar. ¿Qué propuesta?
-Una partida al póker. Esto vale 500K.
Cristina puso encima de la mesa un pedrusco con pinta de ser muy caro.
-Cariño…
-No les voy a entregar a estos tíos 500K así como así. Quiero jugar al póker con vosotros.
-Así que es ella la que lleva los pantalones en la relación. Muy bien, dame media hora para organizar la partida.
Les invitó a entrar en la sala de más arriba.
-¿Pero tú sabes jugar?
-Jugaba con las chicas en el internado.
-Dios mío…
En la mesa estaban 8 jugadores, Cristina y siete tíos ...
... más. Todos con pasta y todos con pinta peligrosa.
Tomás vio como en la primera mano su mujer empezaba fuerte, con 10K, y como subía a 100K. Los demás jugadores, sorprendidos, simplemente pasaron.
-Iba de farol.
-¿Te has tirado un farol de 100K? Eso no tiene sentido.
-Pero he ganado, ¿No?
En la segunda mano repitió jugada, salvo que esta vez estaba muy lejos de ir de farol.
-Nos ha sacado 500K en dos manos.
-Sí, y con esto me retiro, caballeros.
-Nadie se va de la mesa hasta que yo lo diga.
Y Cristina se puso seria. Sí, no había mentido cuando le contó a su marido que jugaba al póker con sus amigas. Lo que no contó es que en comparación con sus amigas, estos tíos parecían aficionados. Para ella las apuestas de 100K eran calderilla mientras que para los jugadores que tenía enfrente era pasta de verdad.
Sencillamente, no tenían ni una oportunidad de derrotarla porque les resultaba imposible de leer.
-Has estado genial.
-Gracias.
-Menuda cara han puesto cuando les has desplumado. Nunca había visto algo como eso.
-Y nunca más lo verás. No quiero que vuelvas a jugar nunca más.
-Genial, ya me estás cambiando.
-Para eso servimos las mujeres, para cambiar a los hombres. Y ahora vamos a comprar una buena casa. Yo a ese cuchitril no vuelvo.
-Lo que tú digas, cariño.
Nueve meses después la familia de Cristina fue informada de que su hija había dado a luz. Se presentó en la casa como el único representante de la familia.
-Me alegro ver ...