Primeros cuernos a mi novio. Disfruté siendo infiel
Fecha: 06/09/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: RRuser, Fuente: CuentoRelatos
... Seguimos trabajando como si nada hubiera pasado. Por la noche regresó su esposa por él con su hija, cerramos y yo me fui al cuarto que rentábamos con mi amor. Sentía mucha culpa y pensaba en si decirle o no a Gery, pero opté por quedarme callada.
Yo pensaba meterme a bañar antes de irnos a acostar, pero el muy caliente de mi amor empezó a calentarme con caricias y besos muy ricos, en poco tiempo ya me tenía completamente desnuda y mojada. Me recostó en la orilla de la cama mientras él metía su boca en mi rajita, sentirlo así me transportó de nuevo a esa silla en la que hacía unas horas Adrián me comía con desesperación. El hecho de imaginar que mi amor estaba en el lugar donde recientemente estuvo una verga nueva me ponía más caliente, no tardé mucho en venirme en sus labios mientras atraía su cabeza hacia mi rajita. No pude evitar imaginar a Gery bebiendo la leche de otro hombre desde mi interior, aunque en esa ocasión Adrián no se vino dentro de mí, pero algunos restos debió haber dejado, mi novio estaba encantado con ese orgasmo que me provocó.
Así como estaba, liberé su cabeza de mi entrepierna y jalándolo del cabello lo subí hasta mi rostro, lo besé succionando su lengua y labios, trataba de saborear mi orgasmo y su ...
... saliva mezclados con los rastros de semen de Adrián, no distinguí sabor diferente, necesitaría mas leche dentro de mí. Mientras nos besábamos Gery me la metió de golpe, me encantaba sentirlo y así de caliente como estaba me hizo venir de nuevo con las metidas de verga que me daba. Mi novio llegaba hasta el fondo de mi ser, su tamaño era el ideal para mí, estaba llena y sentir sus huevos chocando en mis nalgas aumentaba mi excitación. Pero había un extra, ese sentimiento de infidelidad aumentaba mi placer, mi deseo. Acomodamos nuestros movimientos de manera que gemíamos los dos tan excitados que al mismo tiempo nos venimos, podía sentir en mi vagina el movimiento de la descarga de semen de mi novio y él sentía como me contraía por dentro, me volvió a marear ese maravilloso orgasmo.
- Te amo mi amor ¿siempre vas a ser mío verdad? Le pregunté a Gery.
- Te amo para siempre mi vida.
Con esa respuesta cada noche me enamoraba más mi amor y me quedaba dormida entre sus brazos. Le había puesto el cuerno por primera vez a sus espaldas, sentía culpa y al mismo tiempo mi ego estaba por las nubes. Podía tener al hombre que yo quisiera a mis pies y tenía al amor de mi vida a mi lado, qué mas podía pedir.
Aún hay más que contar.