1. Un trabajo en la costa


    Fecha: 13/09/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: zaphyre, Fuente: RelatosEróticos

    ... cuerpo. Entró en el salón masajeando su cuello fatigado, y allí encontró a Marcos tumbado en el sofá, mirando su móvil. Ella sabía bien cómo leer a su hijo y notó de inmediato que algo no había ido bien ese día.
    
    ─ Hola, cariño. ¿Cómo estuvo tu día? ¿Cómo fue la entrevista? ─ preguntó Marta con cariño, sentándose junto a él.
    
    Marcos respondió con tono triste, explicando que la entrevista había sido breve y que le habían dicho que necesitaba el carnet de automóvil, no el de motocicletas.
    
    Marta acarició su cabello, intentando reconfortarlo. ─ No te desanimes, hijo. Era solo la primera, seguro que en la próxima te irá mejor. No pierdas la esperanza.
    
    En ese momento, Laura, su hermana mayor, se acercó desde la cocina para unirse a la conversación. ─ ¡Vamos, hermanito! La vida es así, y no hay que venirse abajo a las primeras de cambio. Seguro que pronto encontrarás una oportunidad.
    
    Marcos sopesó las palabras de su hermana y asintió. ─ Tienes razón, Laura. Gracias.
    
    Laura, siempre con su sentido del humor, bromeó: ─ Además, siempre puedes trabajar de payaso jaja.
    
    Marcos la miró divertido y exclamó: ─ ¡Con que payaso eh! Verás como te pille.
    
    Ambos empezaron a correr alrededor del sofá, como si fueran niños pequeños de nuevo. Marta rio también, disfrutando de ver a sus hijos divertirse y olvidar momentáneamente las preocupaciones.
    
    ─ Chicos, dejad de tonterías y vamos a cenar ─ intervino Marta entre risas.
    
    Los dos hermanos se detuvieron, riendo aún, y ...
    ... Marcos le sacó la lengua a Laura, haciendo una mueca. Laura, sin dejar pasar la oportunidad, bromeó de nuevo. ─ Ves, como eres un payaso jajaja.
    
    Marcos hizo ademán de volver a correr, pero Marta les chistó amistosamente. ─ Tu, Marcos, pon la mesa, y tú, Laura, pon a calentar la comida.
    
    Ambos hermanos asintieron, y Laura le preguntó a su madre: ─ Y tú, ¿qué harás, mamá?
    
    Marta sonrió y respondió: ─ Yo me quitaré el uniforme y estos zapatos que me están matando, y luego cenaremos y disfrutando de un tranquilo momento en familia ─ añadiendo algo de sarcasmo a esto último.
    
    Durante la cena, las risas continuaron, haciendo que Marcos olvidara la frustración de su entrevista fallida. La familia Rodríguez era un equipo unido, capaz de apoyarse mutuamente en los buenos y malos momentos. Y así, entre risas y complicidad, compartieron una velada llena de amor y cercanía que les recordaba que, pase lo que pase, siempre estarían juntos.
    
    CAPÍTULO 2
    
    Habían pasado casi dos semanas desde la frustrante entrevista de trabajo de Marcos, y la suerte parecía esquivarlo en cada oportunidad. Cada vez que se presentaba a una entrevista, siempre había algún requisito que no cumplía, y eso comenzaba a minar su moral y confianza en sí mismo.
    
    Esa mañana, Marta se montó en su coche y se despidió cariñosamente de Marcos, quien estaba ocupado cambiando el aceite de su moto. Sabía que su hijo estaba pasando por momentos difíciles, y deseaba con todas sus fuerzas que la fortuna pronto le ...