Con mi mejor amigo hétero - Relatos Eróticos

Con mi mejor amigo hétero

Esto pasó 4 años después de que tuve sexo con mi padre por primera vez, pero aunque me gustaba mucho hacerlo con él, la curiosidad por saber como sería estar con otras personas me llevó a pensar en mi mejor amigo, ustedes ya me conocen así que no voy a describirme pero si lo voy a describir a él. Su nombre era Andrés, era bastante alto, blanco, de ojos café claro, tenía buen cuerpo y lo más impresionante era su voz gruesa, tan grave que lo confundían fácilmente con un adulto. Nos conocimos en el último año de la preparatoria, él no era muy bueno para hacer amigos, pero yo logré sacarle plática y nos caímos muy bien, él tenía a su novia, hasta ese momento yo no pensaba en andrés como algo sexual hasta que en una de esas conversaciones de sexo salió algo que no me esperaba. A: Fer dice que cree estar embarazada de mí K: y tu que piensas? A: no lo creo, cuando estoy con ella siempre me pongo el condón, no quiero pensar que me es infiel Por mi mente pasaron un millón de imágenes de cómo sería si el me penetrara a mí, y ahí comenzaron mis locas fantasías con Andrés. Puedo decir que yo era su mejor amigo por mucho y él había cambiado para bien, pasó de ser un chico tímido a ser más rudo y viril, para mí pasó de ser solo un amigo, me gustaba. Él y yo nos queríamos y apoyábamos pero luego de esas charlas de sexo nos tomamos más confianza, cuando estábamos desprevenidos nos soltábamos manotazos en los testículos o hacíamos chistes sexuales, eso hacía que mis fantasías con él fueran ...

... cada vez más extrañas, me obsesioné un poco a tal punto de que lo acompañaba al baño nada mas para verlo orinar, en un par de ocasiones pude ver su glande mientras orinaba, al parecer se dió cuenta porque la siguiente vez que fuimos al baño ahora me miraba él a mí, esto en lugar de incomodarme solo me excitó. Pasado un mes resultó que Fer engañaba a Andrés con otro tipo y que encima el hijo era de él, Andrés estuvo llorando bastante rato, en verdad la quería mucho, no pudo hacer nada bien en todo el día y al momento de salir de clases pensé que no podría llegar a su casa sin antes intentar alguna locura, así que me ofrecí a llevarlo a su casa. K: vamos te llevo a tu casa A: no es necesario, yo puedo solo Al final lo convencí de que fuera conmigo y llegamos rápido a su casa, en el camino intenté animarlo un poco pero no funcionó, nada mas entramos a su casa y pensé que esta era la oportunidad de follármelo, maliciosamente ideé un plan, al parecer no había nadie en casa y eso me ayudaba mucho. K: deberías darte una ducha, tal vez así se te pasa la tristeza A: bueno Lo acompañé hasta el baño y entonces lo ví, tenía una bañera enorme en la que podrían estar dos personas adultas, ahora todo era más fácil, rápidamente llené la bañera de agua caliente y vertí el jabón que hacía mucha espuma para hacer un baño de burbujas, mientras Andrés apenas se había quitado la camiseta, me coloqué detrás de él y le dije de forma maternal. K: estás muy desanimado, te ayudo Primero me puse delante ...