Sexo adictivo con mi jefa - Relatos Eróticos

Sexo adictivo con mi jefa

Es fin de semana, estoy en la cama perezosa porque hoy no toca ir a trabajar. Mejor porque ya no sabría con qué ojos mirar a mi jefa y si podría disimular el deseo lascivo que siento por ella. Después del trío con su antigua amiga y futura inversora en nuestra empresa no paro de quitármela de la cabeza. Me acuerdo de ella, desnuda, con el arnés penetrando a Carmen y gimiendo a la vez. Recuerdo sus pechos grandes rodeando mi cara, sus labios gordos y esos besos húmedos que atrapan mi lengua... Derepente siento que estoy un poco húmeda. Empiezo a tocarme un pezón y con la otra mano, despacio, acarició mi sexo, despacio, mis labios se van abriendo para dejarme entrar en mi misma, mis dedos se deslizan y yo sigo pensando en Carmen a cuatro patas y como me pedía que le acariciara el clítoris mientras tenía sus pechos en mi boca... Esos pensamientos recurrentes me hacen llegar al orgasmo en seguida.

No está nada mal el giro que ha dado mi vida en los últimos días. Pienso que no puede durar eternamente y me entran dudas de si será lo mejor para mi carrera profesional pero la verdad es que no le doy importancia, ahora mismo valoro más todas las nuevas emociones y los nuevos placeres que me está brindando el día a día. No puedo parar ahora. Sólo pienso en llegar a la oficina y encontrar la manera de meterle mano a mi jefa, o el lugar donde podamos follar a escondidas y con el morbo añadido de que no puedan pillarnos. Que nos descubran no es una opción, ella tiene familia y yo ...

... arruinaría mi carrera.

Recibo un mensaje de ella: Ayer estuviste increíble, morí de placer cuando nos miramos mientras yo estaba penetrando a Carmen. No puedo quitármelo de la cabeza.

Yo: Acabo de masturbarme pensando en todo lo que pasó, no puedo evitar estar cachonda todo el día porque solo tengo imágenes de ti desnuda. Estoy enganchada al sexo contigo.

Ella: crees que podríamos vernos un rato ahora por la mañana?

Yo: Vente a mi casa. Algo rápido para quitarnos un poco este subidón. Yo estoy cachonda desde que me despierto, todo por tu culpa ...

Ella: mándame ubicación

Al rato aparece con Donuts y café. Yo la recibo con una camiseta, sin sujetador y en bragas. Nada más verme deja las cosas y empieza a tocarme los pechos, mis pezones se endurecen, ya empiezo a notarme húmeda, es algo superior a mi, verla entrar e ir tan decidida ardiendo en deseo de hacerme gozar me pone súper cachonda, yo levanto su vestido, otra vez viene sin bragas y toco sus labios: ya está mojada!

La miró a los ojos y me muerdo el labio, mi cara delata mi excitación.

Ella: desde que sabía que venía a verte estaba a mil por hora.

Sigo tocándola mientras nos miramos a los ojos, ella gime, yo deseo que me toque también y se lo pido: entra en mí o me muero .

Ella obedece. Tenemos un primer orgasmo y nos vamos a la cama a seguir disfrutándonos.

Saco un arnés y me lo pongo. Empiezo a penetrarla despacio, mientras la beso, ella me toca los pechos, yo me muero cada vez que me ...