1. Un trío con Gina


    Fecha: 08/02/2025, Categorías: Infidelidad Autor: rickmaster16, Fuente: CuentoRelatos

    ... abrió su boca para que Gina le escupiera dentro mi semen y después se besaron mezclando su saliva con mi leche, gotas caían en largos chorros sobre mi abdomen.
    
    Ahí fue cuando decidí tomar un descanso. Tomé la botella de vino y fui al sillón sexual, me senté y me dediqué a observar. Jeniffer se acostó boca arriba, abrió sus piernas y tomó a Gina del brazo atrayéndola. Gina encajó allí su mano y empezó a penetrarla con los dedos mientras se besaban apasionadamente. La segunda cosa más hermosa que he visto con toda seguridad, dos sinuosos cuerpos femeninos rozando, gemidos, gritos, dedos húmedos entrando y saliendo, manos apretando, una obra de arte.
    
    Volví a la cama mientras ellas seguían en aquello, todo era gemidos y gritos. Gina empezó a meterle los dedos a Jeniffer con rapidez y sevicia mientras le apretaba una teta, salvaje. Hacía realidad su sueño de tener a disposición a esa bella chica mientras yo hacía realidad mi sueño de tener a dos chicas para mi.
    
    Caímos los tres boca arriba y empezamos a hablar de cosas del trabajo.
    
    -Oye, ¿es verdad que te ves con Jorge?- le pregunté a Jeniffer.
    
    -jajaja sí, a veces, nos escapamos al medio día. ¿Hace cuánto se ven ustedes? - respondió.
    
    -No sé bien, como un año y algo más
    
    -ustedes son muy locos, me encantan
    
    Acto seguido me levanté y me lancé sobre Jeniffer. Separé sus piernas y se la metí. Hizo un movimiento circular que masajeó mi verga de forma tal que sentí ganas de venirme de nuevo. La saqué de ...
    ... inmediato sorprendido por semejante jugada. Puse mis manos sobre sus caderas para evitar que pudiera moverse igual y empecé a penetrarla. Gina nos veía acostada a un lado.
    
    Me fui hasta el sillón sexual y me acosté boca arriba allí. Jeniffer se subió sobre mí y empezó a cabalgarme. Sus grandes tetas rebotaban y mis manos no daban abasto para recorrer tan amplias montañas. Le apretaba los pezones mientras gemía con cara de angustia sobre mi verga.
    
    -Me vengo - dije.
    
    De nuevo, respetando el orden de las cosas, Jeniffer se levantó de golpe para darle alfombra roja a Gina, que, conocedora de lo que tenía enfrente, agarró mi tubo con la mano y se lo encajó en el coño. Empezó a moverse como solo ella se movía sobre mí, sintió el preámbulo como solo ella sabía sentirlo, sabía que allí venía yo a llenar su coñito joven y poco usado de leche magra. Me vine en un largo gemido.
    
    Éramos amigos, charlamos mientras nos duchábamos para quitar el aroma a sexo del cuerpo. Hasta donde yo sabía Jeniffer no tenía una pareja, era la única legalmente habilitada para hacer todo aquello. Gina y yo si reparábamos en los detalles que pudieran llevarnos a perder la vida como la conocíamos.
    
    Salimos de allí, pedimos dos taxis, uno para ellas, uno para mí. Me encontré con mi amigo, le relaté cada detalle, llegué a mi casa, dije que estaba cansado, me acosté a dormir.
    
    Mucho tiempo después Gina me diría que fue al mismo motel y al mismo cuarto solo con Jeniffer para tener una deliciosa aventura ...