La contorcionista - Relatos Eróticos

La contorcionista

... aromas olor a rosas, ahora comételo, esta listo para ti.

en ese momento descendió su sexo hasta mi boca, la cual dispuse para dar placer a ese bello manjar frente a mi, sus manos estaban apoyadas en la pared

le acariciaba con mi lengua, la succionaba, mordía, le metía la lengua, estaba deleitándome de su pasión,

pasado unos minutos, su sexo estaba mojado por mi boca y sus jugos, ahora te enseñare mi mayor talento

seguía comiéndole su sexo, mientras ella puso su espalda sobre mi cuerpo, con sus brazos levanto su cuerpo e hizo un arco hasta que su cabello estaba en mi estomago y su rostro frente a mi pene,

No podía dar crédito a lo que pasaba, su sexo estaba en mi cara, sobre mi estaba su espalda arqueada, y su cara estaba mirando mi pene, su elasticidad le permitía estar de espaldas pero dejar su sexo frente a mi y su cabeza al revés para mamar lo que quisiera,

fue cuando sentí como sus labios besaron mi glande, su lengua recorría mi pene de principio a fin, mis huevos estaban siendo acariciada por sus lengua,

Comenzó a introducirse mi pene haciendo presión con sus labios, suavemente se deslizaba hasta el fondo, comenzó un mete y saca, tierno, despacio, ella sabia ...

... como se daba placer con la boca

Estuvimos así por un tiempo hasta que sentí como chorros salían de su concha, me baño por completo el rostro y mi boca estaba llena de ese jugo riquísimos, sus gemidos en ese momento eran mas intensos y su boca se introducía frenéticamente, la presión era fuerte pero delicada, mientras le devoraba y tragaba sus jugos no pude decir que me correría, ella, al sentir mi lechita se puso en la punta para un saca mas pequeño, pero conocedor de placer hasta que dejo de salir mi semen, sin cambiar de posición con una agarro el tronco y comenzó a escurrir el semen para tragárselo todito,

se dejo caer sobre mi, su espalda y mi pecho estaban sudados del placer, su cansancio se podía oír en su respirar, al igual que el mío, pero mis ojos no dejaban de ver su sexo y su culo frente a mi,

tengo que comerme este culito le dije abrí sus nalgas y como pude le plante un beso en su ano

Ahora sabes como se hace la p, b, q o d, como quieras llamarlo,

Y mi traserito, déjalo para mas tarde, que quiero recuperarme, pues veras como hacer la licuadora, unos movimientos de cintura, que aprendí cuando me practicaba la danza del vientre, que no hay quien los resistas.