Nora la ordeñadora (Capítulo 1)
Fecha: 22/02/2025,
Categorías:
Hetero
Autor: Thorman, Fuente: CuentoRelatos
... plan de ataque sopesando los pechos y moviendolos para que bambolearan. Ella hizo un contoneo sexual. Bajó hasta su coño y lo dedeó. Sacó el dedo y la miró con ojos penetrantes y tras una sonrisa de chacal se desnudó. Tras quitarse la ropa Rulfo se sentó en su cama, abrió las piernas y con vigor masculino escupió de forma sonora sobre su glande y dio unos pajeos a su polla y dijo:
- ¿Has ordeñado nunca una como esta?
Nora se quedó mirando fijamente la gran polla de Rulfo y con muchísima rabia la agarró para demostrarle su poderío femenino, a sus 23 años desperdiciado. Empezó un pajeo con retrocesos bombeados (lo había visto en el porno de su portátil. Consistía en agarrar el tronco y bajar hasta que su mano rebotaba en la pelvis) mientras lo miraba a los ojos.
- Apuntas maneras, nena - dijo Rulfo tras unos resoplidos.
Nora mira con intensidad a Rulfo, estaba arrodillada a su lado como una pava real. Solencio el hiena miraba la desinhibida Nora que sin ningún pudor pajeaba a su sobrino delante de él. Rulfo estiró el brazo introdujo dos dedos en el peludo coño de Nora, la cual empezó a jadear; su coño era un charco de flujos vaginales, incluso goteaba. Solencio ya se tocaba su polla.
- Vamos a ver si se te da tan bien usar la boca como ordeñar - dijo Cara cortada en un dejo de jocosidad bajándole la cabeza.
Nora inhaló aire, abrió la boca y engulló media polla; quería rematar la faena pero era mucha polla. En un arranque airado Rulfo le atenazó la nuca y la ...
... empujó hasta el fondo. Nora emitió un sonido gutural de atragantamiento y sus ojos estaban desorbitados. Manoteaba buscando aire; Cara cortada la suelta, su respiración es algo acelerada, al instante vuelve en si; Rulfo le recoge el pelo en lo alto y el ataca otra vez; no puede abarcar la toda, es algo desgarbada en la mamada. Solencio esta alterado y excitado viendo a su sobrino, el cual en clara deferencia a él le ha recogido el pelo para que pudiera ver su cara. Le lamía el tronco y glande, chupaba como podía. Cara cortada volvió a empujar la cabeza de Nora hasta el fondo y aguantó su cuello en forma de tenaza y grito:
- ¡¡Toma rabo!! ¡¡Aguantala!! - Al mísmo tiempo que miraba a Solencio con la mandíbula apretada.
Nora vuelve a buscar aire, se oyen los glup, glup de su garganta.
- Venga, vamos a contar hasta diez, nena: aguanta. Empezamos. 1, 2, 3, 4.
Las mejillas de Nora empezaron a hincharse y a enrojecer, su respiración era nasal y rápida.
- 5, 6, 7
- ¡Va a reventar! - exclamó Solencio.
Empezaron a salirle los mocos, los ojos llorosos.
- 8, 9
Le vinieron las arcadas, convulsionaba.
- Y... - esperó un rato - ¡10!
Entonces la soltó dejando ella un rastro de moco y saliva. Su respiración era acelerada y continua, buscaba aíre. En un arranque atletico Cara cortada tiró de sus pies y la llevó al borde de la litera hasta que su cintura y piernas quedaron suspendidas en el aire. Tiró la almohada al suelo, se puso de rodillas sobre ella, la cogió ...