La Pitbull café - Relatos Eróticos

La Pitbull café

... dejar caer mi pera empujando mi pubis hacia el de ella, el calor de su interior es indescriptible la suavidad y lo lubricado hicieron que mi verga se sentía reventar hasta que la base de mis huevos toparon con el pubis de la perra estaba penetrándola lo más profundo que pude llegar sentía como en su interior había contracciones que succionaban mi verga no queriéndola dejar salir tan fácil, -uff- exhale – eso es lo que te gusta verdad- le dije a la perra mientras sacaba la lengua de felicidad y comencé el mete- saca lentamente para observar como mi verga salía y entraba a tan rica vulva rosada húmeda y caliente, mientras la perra lamia mi cara y lo de devolvía la lamida sintiendo su lengua áspera rosando en la mía sentía como en cada bombeo las contracciones de la perra empujaban hacia adentro mi verga, cuando sentía que estaba a punto de venirme tome a la perra lo más fuerte que pude de sus patas traseras y saque mi verga para un segundo después embestirla con más fuerza hasta en fondo no podía más con cada embestida mi pene se preparaba para soltar la leche que tenía en ese momento hasta que no pude más y en la última embestida a su vulva empuje lo más que pude mi verga para que mi semen llegara lo más adentro posible sentía cada contracción de mi pene soltando bastante semen dentro de la perrita cuando sentí que se habían ...

... terminado deje mi pene dentro de la perra y me recosté sobre ella, no sé cuánto tiempo haya paso pero mi pene después de correrse dentro aún seguía algo duro así que decidí vaciarme por completo pero no en su vulva de nuevo. Me incorpore como pude la perrita giro de costado y lamia su vulva la emanando de mi semen fue en ese momento que metí mi dedo en su vagina y con mi semen y sus líquidos lubrique su ano (ella ya está acostumbrada a que me la folle por el culo) comencé a dedearla despacio para que pudiera aflojarse hasta que mi dedo entraba y salía con facilidad entonces la puse de pie y yo me senté en el sillón el cual hacia que mi verga quede justo a la altura de su culo me puse un poco de saliva en la punta y jale a la perra hacia a mi –uffff- entro con mucha facilidad la perrita solo giraba y me lamia la verga y comencé con el bombeo, sentía como mis huevos chocaban con su vulva que escurría mi leche no tarde mucho en venirme y llenarla de mi leche por sus dos orificios, cuando terminamos la lleve al baño y nos demos una ducha juntos lo cual termino en una nueva culiada y más de mi leche dentro de su vulva cuando una vez la perrita en su lugar limpie la sala para que no dejara nuestro olor a sexo y quitar los líquidos que quedaron regados como aun no oscurecía decidí irme a casa caminado, deslechado y sin estrés. By heart_moon69