Juegos eróticos
Fecha: 28/03/2025,
Categorías:
Confesiones
Autor: johnsmith2347, Fuente: CuentoRelatos
... entonces que comenzó a tocarme los labios mayores. Sus caricias me parecieron inocentes al principio, pero poco después comencé a sentirme húmeda.
- No Erick, no me toques así, estas haciendo que me humedezco - Le dije de forma agitada
El se detuvo. Seguramente pensó que no me estaba gustando.
Entonces me quite las pataletas y abrí mis piernas de nuevo. Erick se acercó lo más que pudo para verme.
De pronto, el hizo algo que no esperaba y me beso, justo ahí, en esa zona tan íntima.
- No Erick,... no deberías besarme ahí... harás que me excite - Alcance a decir entre jadeos, con los ojos cerrados
El se dio cuenta de que me agradaba y siguió haciéndolo. Sus besos eran cada vez prolongados, como si me estuviera besando en la boca. Su lengua no tardo en conocer mi dulce intimidad.
- Si Erick, así, no te detengas - Le dije
Me estaba comiendo tan rico con su lengua y sus labios que hicieron que tuviera algunas contracciones vaginales debido a los microorgasmos que me estaba provocando.
Poco después me senté sobre la toalla y lo besé. Erick respondió favorablemente a mis besos y no dejaba de acariciarme los senos.
Tuvimos muchos encuentros de ese tipo en el baño en el que no había sexo como tal.
El sabía que no podía o no quería tener sexo con él para no estropear mi relación Andrés, su padre.
Por ejemplo, un día le pedí que se desnudara y me subí encima de el y comencé a frotar mis labios mayores encima de su pene erecto.
Eric gemía ...
... mientras me acariciaba los senos y las nalgas. Lo frotaba suavemente, sin prisas y comencé a gemir, para que el se excitara aún más.
Finalmente, algunas gotas de semen comenzaron a salir con fuerza seguidas de mucho más semen que fue a parar a su vientre.
A Erick le encantaba que le hiciera eso, porque tenía contacto directo con mi vulva y mis labios mayores, tanto que en ocasiones la cabeza de su pene había llegado a entrar un poco en mi, pero cuando eso sucedía lo sacaba casi de inmediato.
Pero si he de ser sincera, me he relajado en ese aspecto un poco, y lo he dejado estar dentro de mí, incluso por momentos un poco más prolongados.
No había querido reconocerlo, pero Erick ha estado más tiempo dentro de mí del que me hubiera gustado. No hay manera de negar que si hemos tenido relaciones con la excusa de que han sido pequeños resbalones de su pene dentro de mi.
Lo reconozco, lo que empezó como un juego con pequeñas concesiones de mi parte, se ha convertido muchas veces en sexo rico, resbalosito y... prohibido, porque ha entrado hasta el fondo, haciendo que se me escapen varios gemidos. Eso fue lo que sucedio la ultima vez que nos vimos, me dió de perrito muy rico.
Afortunadamente el ha aprendido a controlarse, espera a que tenga mis orgasmos y cuando le dan ganas de venirse lo hace, pero siempre eyacula fuera de mi.
A estas alturas Eric ya conoce a mi dulce intimidad. El ya ha estado dentro de mí varias veces. Una y otra vez ha entrado y salido de mi hasta ...