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Infidelidad, daños colaterales
Fecha: 30/04/2025, Categorías: Infidelidad Autor: elzorro, Fuente: CuentoRelatos
... delito y él no era un tipo de esos, o al menos no lo había sido nunca. Además, con la velada amenaza valdría, después de todo la muy guarra lo haría con cualquiera, solo que él no le iba a dar placer, no, él quería venganza. - Sé que estás engañando a tu marido. - soltó sin más. Ella lo miró y su expresión dijo más que un centenar de palabras. - ¿Y eso que te importa? - Nada, si no fuese por lo que hicistéis. La historia, contada con resentimiento y dolor puso en guardia a la mujer. Ese tipo estaba loco y era capaz de cualquier cosa... solo que lo que decía de ella era verdad y ella no estaba preparada para confesar. - ¿Qué quieres de mí? - dijo la mujer sin poder esconder el temor. El tipo se rio y la miró de arriba a abajo desnudándola. - Quiero que te quites la ropa. - Me vas... me vas a follar. - respondió la aludida considerando por un momento si la idea de hacerlo con ese pervertido sería una salida aceptable. El volvió a reír como un loco. - Eres una guarra y no te voy a hacer el favor. - ¿Entonces, qué quieres? - Castigarte. Unos minutos después aquella mujer gritó y pidió que parase, pero él no se detuvo. Después silencio, lágrimas. - ¿Puedes desatarme? - Sí. Ella se incorporó con dificultad, estaba más tranquila, su secreto a salvo a menos qué... sí, pensó en las otras. ************** - No puedo hacer mucho. - respondió la agente contemplando el culo marcado de la mujer. - Lo sé, esos papeles... - ...
... Exacto. Firmaste el consentimiento, te dejaste atar, luego los azotes... - Ya, práctica sadomasoquista consensuada. - respondió la víctima resignada. - Pero vamos, también puedes denunciar, si cuentas toda la historia a lo mejor... - Mi marido se enterará. - Ya. - No quiero renunciar a mi marido. El me da sexo y mucho más. - acabó diciendo resignada. "Y además los azotes no te han disgustado. " pensó la agente aunque al rato borró ese pensamiento. Ella no era nadie para juzgar y menos para saber lo que le ponía o no a otra mujer. - Quizás se lo cuento a una periodista. - musitó la mujer levantándose. La agente la vio alejarse y pensó en la periodista. Menuda historia, si salía a la luz tendría atemorizadas a las infieles del país... o quién sabe, quizás no dormirían resolviendo el dilema de convertir en realidad sus oscuras fantasías. ************** El tipo vestido con traje de negocios regresó a casa con una sonrisa, dibujando en su mente una sesión de besos tiernos y caricias mientras ella cabalgaba con la cara encendida. No llamó y entró sin hacer ruido. Se oía el agua de la ducha. Se quitó los zapatos y la chaqueta y de puntillas, en calcetines, se dirigió al baño. La puerta estaba entreabierta y dentro había una mujer en cueros con los ojos semicerrados mordiéndose, sensualmente, el labio superior. Luego vio el culo musculoso, peludo y prieto de un varón que tapaba en parte el cuerpo de su esposa. En ese momento su mujer gimió ...