1. Unas vacaciones con mi madre (P.3) Por la mañana en la playa


    Fecha: 01/05/2025, Categorías: Incesto Autor: Alfil-1, Fuente: CuentoRelatos

    ... agradable excitación.
    
    – Hola! Dijo una voz femenina. Los dos volvieron la cabeza a la vez, era Estela que se acercaba caminando por la orilla con una toalla en la mano. La chica rubia de la noche anterior llevaba un pequeño tanga naranja y las dos grandes tetas al aire, una visión que perturbó ligeramente la mente de Luis.
    
    – Que tal Estela? Preguntó Luis.
    
    – Bien! La verdad es que me he venido paseando a ver si te veía!
    
    – Pues aquí estoy, con mi madre! Acabamos de llegar y andábamos con la crema solar.
    
    – Quieres tumbarte con nosotros? Le ofreció Elena.
    
    – Hace calor y había pensado darme un baño! Me acompañas? Dijo ella mirando a Luis.
    
    Él, a la vez, miró a su madre.
    
    – Anda, ves con ella al agua y divertiros un rato! Dijo Elena ante la mirada de su hijo.
    
    – Vale! Pues vamos!
    
    Le dijo a Estela que prácticamente tiro la toalla sobre la arena y le agarró de la mano. Los dos corrieron hasta la orilla y después saltaron las olas hasta zambullirse. Nadaron un poco y se quedaron en la zona que les cubría por el cuello. Estela se acercó hasta el muchacho y le puso las manos sobre los hombros a la vez que pegaba su cuerpo al de él. Luis sintió como las grandes tetas se aplastaban contra su pecho y las piernas de Estela le rodeaban bajo el agua. Giraron y saltaron al son de las olas hasta que Estela pego sus labios a los de Luis. Fue un beso rápido seguido de varios más hasta que los labios se quedaron pegados durante más tiempo y las lenguas se enroscaron ...
    ... lascivamente. Ella se había abrazado al cuello de Luis cómo una boa constrictor, y su boca parecía devorarlo. Luis sujetaba su gran culo, apretándolo con ganas, y al momento sintió como el miembro se le había endurecido. Ella también lo notó y se apretó más contra él. Cuando separaron sus labios ella sugirió.
    
    – Podemos ir a la zona donde están mis padres y tomar algo en mi casa!
    
    – Bueno, es que no quiero dejar a mi madre sola.
    
    – Que se venga! Mis padres estarán encantados. Me dijeron que habían congeniado en el restaurante!
    
    – Vale, se lo diré a ver qué le parece. Pero deja que nade un poco, no quiero salir con el bañador abultado! Sonrió Luis mirándose hacia abajo.
    
    - Que tal, os habéis divertido? Preguntó Elena al verles llegar.
    
    – Si, hemos pensado en ir a donde están sus padres, pero solo si te apetece venir! A Elena también les había caído bien y aceptó.
    
    – Vale, pues vamos para allá! Dijo cogiendo el bolso de playa y la toalla.
    
    - Hola, que tal? Dijo Carlos al verles llegar.
    
    – Bien! Bien! contestaron los tres.
    
    – Me he traído a Luis y a su madre.
    
    – Me parece fenomenal! Contestó Carlos mirando a Elena con ojos escrutadores.
    
    - Tumbaros por aquí! Agregó Carlos.
    
    - Nosotros vamos a tomar algo a casa! Dijo Estela con rapidez.
    
    – Estoy seca!
    
    - Me parece bien! Aceptó su padre.
    
    Elena puso la toalla sobre la arena a un metro de Carlos mientras los chicos salían hacia el chalet que estaba enfrente.
    
    – Está fenomenal este sitio! Dijo Elena ...