1. Pierdo mi virginidad con José


    Fecha: 04/05/2025, Categorías: Primera Vez Autor: Alicia004, Fuente: CuentoRelatos

    ... mi ser y José comenzó el mete saca. Llevaba un ritmo muy rápido para ser nuestra primera vez, metiéndola y sacándola provocando el placer en mi.
    
    Tras 2 minutos de intensa penetración, comencé a sangrar y el me tranquilizó diciendo que era normal. Notaba su pene impactar contra lo más profundo de mi vagina y salir, lo que yo disfrutaba. Tras varios minutos follandome, el se tumbó y me dijo que le cabalgara. Así lo hice, y mientras botaba sobre su pene, podía ver lo bueno que estaba y lo mucho que quería seguir teniendo sexo con el. El me agarraba de las tetas pero a mí no me importaba mientras seguía cabalgando y gimiendo. No paraba de gritar cada vez que notaba que sus huevos impactaban contra mi trasero al bajar.
    
    Tras varios minutos, el se quitó el condón y me dijo que se la chupara. Siempre que había oído hablar de sexo oral en las charlas del instituto me daba asco y me preguntaba cómo la gente hacia eso, pero teniendo a José delante era diferente. De repente quería succionarle todo, tragarme todo. Así que sin pensarlo me puse de rodillas y comencé a chuparle el pene. Me lo metí hasta el fondo y notaba como su pene llegaba hasta el fondo de mi garganta. Me lo llevaba hacia un lado y mis mejillas se inflaban con semejante miembro. Producía un montón de saliva, y con mi lengua le lamia todo el tronco.
    
    Como era mi primera vez y no una experta, el acabo llevando el ritmo y el control y empezó a perforarme la garganta. Su pene tocaba mi campanilla, y sus ...
    ... testículos mi barbilla. La saliva se escapaba de mi boca y resbalaba por toda mi cara llegando a mis tetas. El siguió perforando mi boca durante varios minutos, hasta que a mí me comenzaron a dar arcadas y tuvimos que parar. Entonces me puso a 4 y me metió el pene hasta el fondo. Elevó el ritmo de sus embestidas y sentí que su tremenda verga acabaría perforando mi estómago. Yo no paraba de gemir y disfrutar, que junto al choque de sus piernas con mis nalgas creaba una melodía que seguro los vecinos oían.
    
    Además, comenzó a darme cachetes en el culo, que dolían pero no me importaban. En ese momento solo quería seguir sintiendo su glande golpeando mi vagina. José me seguía golpeando el culo dejándomelo rojo mientras gritaba mi nombre y el buen culo que tenía. La verdad es que nunca había pensado que José, el chico mono de clase tuviera tremenda verga que me perforara mi ser. Yo cada vez sentía más placer y hubo un momento que no resistí más y me corrí.
    
    Había tenido un orgasmo en mi primera vez, y mis fluidos salían de mi coño, el cual tenía un tamaño del doble que solía tener. José de dio cuenta de mi orgasmo, y decidió poner punto final. Tras unas profundas envestidas, saco su pene de su trasero y me puso de rodillas.
    
    Mientras el se masturbaba, yo saqué mi lengua y le succione los testículos. No me esperaba lo que iba a hacer, pero así de repente, vi un gran chorro blanco salir de su pene. Justo me dio tiempo de cerrar los ojos y de repente, comencé a sentir ligeros golpes ...