Noelia una sumisa no tan asexual (V)
Fecha: 19/05/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: sireleo, Fuente: CuentoRelatos
... ella haya despertado tan tarde, pero vamos a intentar que recupere el tiempo perdido, jajaja.
-ya está todo señor, voy a bajar la basura.
-solo ponte la camisola guarra, pero deja las bragas en la entrada.
Esperaba la primera negativa o un sonrojo, pero ni una cosa ni otra.
-como desee señor
No me moleste en comprobarlo, sabía que lo iba a hacer.
Cuando entro otra vez en la terraza e iba a ponerse de rodillas…
-como no me gustan esas bragas, hasta que no vengan el lunes las que te he pedido, no volverás a usarlas, ni para salir a la calle.
Se las quito y se limitó a apartarlas con el pie.
-asi será señor.
Para mí es algo normal, pero Noe aún estaba asombrada de la docilidad de su madre, sin percatarse que con ella fue igual de fácil, supongo que el que fuese su madre se lo hacía más dificil.
La verdad es que estábamos cansados, y se notaba, a pesar del estado de excitación de las dos.
Me acerque a ella…
- ¿puedo hablar señor?
Me gusto
-si puedes guarra.
-deseo que me mee
A su hija se le escapo un taco y todo al oírla
-lo pensaba hacer guarra, hoy ya no creo que me pueda volver a empalmar, y por eso te he mandado poner de rodillas aquí.
-gracias señor.
No le di tiempo a más, y empecé a mearme, aunque esta vez dejo la boca abierta, pero tuvo que cerrar los ojos por las salpicaduras.
Cuando no había terminado porque llevaba tiempo aguantándome, empezó a convulsionar y a gritar que se corría, tanto que los últimos ...
... chorros le cayeron estando desparramada en el suelo.
Se quedo asi un rato, temblando de placer y dándome las gracias.
-te toca perra, es tuya.
Mi perra con una sonrisa diría yo que hasta sádica se acercó a su madre que seguía tumbada, puso una pierna a cada lado de la cara de la guarra, y apartándose la braga empezó a mearse en ella.
- ¿puedo seguir señor?
-es tuya perra.
Se quito la braga dejándola en el suelo, y se fue a una tumbona.
-vieja guarra ven aquí andado como una perra y cómeme el coño.
Ya estaba empezando a refrescar, pero la temperatura en esa terraza era muy pero que muy alta.
Su madre se acercó tal y como le indico mi perra, pero cuando estaba ya acercando su cabeza al coño de su hija, está la agarro del pelo y se la hundió en su coño, casi la asfixia.
La tuvo comiéndole el coño hasta que se corrió tres o cuatro veces, o, mejor dicho, hasta que yo ya estaba muerto de cansancio y di por terminada la velada.
-vamos a la cama. Hoy te has ganado dormir en mi cama perra, y tú a la cama asi, sin lavarte, y por cierto el baño del dormitorio es solo mío, solo lo usareis si yo os lo pido o para limpiarlo.
Ambas a la vez contestaron afirmativamente.
La guarra olía realmente mal, pero como por respeto a la edad no podía hacerla dormir en el suelo, que mejor que durmiera como lo que era una guarra.
Ya no recuerdo más de esa noche, porque fue caer en la cama y quedarme dormido y satisfecho.
A la mañana siguiente, me desperté ...