Salí con una amiga y terminé en la cama de un desconocido
Fecha: 19/05/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: luz40, Fuente: RelatosEróticos
... confianza y pude sentir entonces como Luis eyaculaba un potente chorro de semen dentro mío mientras me acariciaba los vellos de mi vagina.
Me di la vuelta, lo bese apasionante, el se recostó de espaldas y yo me quedé apoyada sobre su pecho agotada mientras me acariciaba el cabello y podía sentir como de mi vagina escurría su semen, pero no me importó y me relajé en esa posición hasta quedarme dormida.
A la mañana siguiente, cuando desperté, Luis seguía dormido, vi la hora y ya eran las 11 de la mañana.
Dejé tranquilo a Luis y me levanté, comencé a buscar mi ropa, me estaba colocando la ropa interior cuando Luis despertó y me preguntó que ocurría, le dije que ya me iba porque mi marido me esperaba en casa.
Entonces Luis se acercó a mi, me acarició el trasero por debajo de la ropa interior, me miró, sonrió y me dijo que antes podríamos hacerlo una última vez a modo de despedida.
Le sonreí de vuelta, tomé mi teléfono y llame a Andrés a quien le dije que iba a quedarme a desayunar con Paola y luego me iría a casa, ante lo cual Andrés no objetó y nuevamente se lo creyó.
Luego ...
... de eso me desnudé, volví a la cama con Luis y nos recostamos abrazados y besándonos apasionadamente.
Posteriormente desayunamos en la cama y Luis comenzó a acariciarme, nos besamos y se acostó de espaldas con una erección que me excitó demasiado al verlo sin condón, completamente libre.
Inmediatamente me monté sobre su erecto miembro que se introdujo hasta el fondo de mi vagina, comencé un rico movimiento y podía sentir como su pene tocaba mis paredes vaginales, el me abrazaba, succionabamos nuestras lenguas, apretaba y besaba mis pechos y se movía de tal forma que podía sentir su miembro dentro mío en todo su esplendor a la vez que se lo intentaba aprisionar con mi vagina.
Estuvimos así hasta que finalmente sentí dentro mío su potente descarga de semen que me hizo temblar de placer y caer rendida a sus brazos, besándolo como si el mundo se fuera a acabar.
Agotada, pero feliz, decidimos levantarnos y vestirnos, me despedí con un apasionado beso y guardé su número de teléfono en mi celular con la intención de juntarnos nuevamente lo que estoy segura va a ocurrir muchas veces más.