1. Íntimo


    Fecha: 21/05/2025, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Fd, Fuente: CuentoRelatos

    Intimidad…
    
    Estábamos tan necesitados, tan calientes, tan deseosos…
    
    Pero aún no era el momento, el médico no me había dado del todo de alta y una de las cosas que todavía tenía restringidas era la intimidad. Ya casi ha pasado un mes desde la última vez que lo sentí dentro que me hizo el amor y derramó su semilla en lo más hondo de mi ser.
    
    Nos estamos aguantando evitando casi todo el contacto físico que nos haga flaquear.
    
    Pero hay abrazos que lo incendian todo que hablan, que tienen un lenguaje propio, que dicen y nosotros nos ahí dijimos todo: la falta que hacen nuestros cuerpos juntos, las ganas de estar en los brazos del otro. Este abrazo no debió ser, no todavía porque yo sabía que después de sentirnos como nos sentimos iba a ser imposible guardar la compostura y detenernos.
    
    Él se ha descargado un par de veces en este tiempo una vez cada semana y media la primera yo aún estaba en el hospital vi el video que me envió debajo de las sábanas y con unas enormes ganas de estar a su lado, la otra lo escuche desde el otro lado de la puerta de nuestra habitación sus gruñidos al momento de explotar hicieron palpitar mi sexo, en ambas ocasiones se derramó sobre unas fotografías mías, pero hoy veo en sus ojos que ya le es imposible contenerse y peor que hace dos días ya volvimos a dormir en la misma cama y aunque todavía no me recuesto en su pecho antes de dormir ni él me ha abrazado desde atrás nuestro calor corporal es irresistible.
    
    Me grita desde el baño que le ...
    ... lleve una toalla.
    
    Le llevó la toalla a la ducha y me dice con una pícara sonrisa que la olvidó, pero creo que lo hizo a propósito para que lo vea tal como Dios lo trajo al mundo.
    
    Estoy tan caliente y excitada por verlo desnudo y listo para mí que las bragas de vieja que llevo para no despertar su libido están empapadas.
    
    Llevamos unos diez minutos acostados haciendo el cuento que nos hemos dormido, estoy boca abajo para no mirarlo, pero sé que tiene su verga dura. De pronto siento como se incorpora el paseo en el colchón se reacomoda y sé que viene a mis pies, comienza a bajar la pijama con todo y calzones mata pasión dejando al descubierto mis nalgas que tanto le gustan. Las acaricia y aprieta provocando mi deseo aún más. Me da la vuelta mientras suplico con mis ojos ¡no por favor! No porque no quiera, no porque no lo necesite. Sino porque no quiero contaminarlo.
    
    Luego me toma de los tobillos y me gira como si fuera una mona de trapo, se deja caer sobre mí, siento su peso, está en bóxer, pero siento su erección presionar y palpitar contra mi pubis cierro un poco las piernas para impedirle el fácil acceso. Levanta mi blusa y pone un beso tímido sobre mi pezón derecho, su hambre aflora y lo come con desesperación luego es turno del otro. Mis piernas ceden y se abren contra mi voluntad, debe notar mi calor y mi humedad aun con la ropa interior entre nosotros porque abre los ojos con lujuria y asombro.
    
    Separa ese momento mis piernas y se pega más a mí. Mis piernas ya ...
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