1. Mi primera vez con otro, después de mi pareja


    Fecha: 27/05/2025, Categorías: Infidelidad Autor: AllieNowak, Fuente: CuentoRelatos

    ... total, nadie nos escuchaba en mi departamento.
    
    Llegó el momento en que yo deseaba sentirlo y abrazarlo, por lo que nos fuimos al cuarto, y le dije que tenía una sorpresa para él, nos fuimos al cuarto, me metí al baño y me puse el vestido sexy que quería mostrarle, cuando me vio supe bien que moría de deseo por mi pues me cargó y me recargó sobre la pared y empezó hacerlo de esa forma, posteriormente, me llevó a la cama y empezó a hacérmelo en misionero mientras me abrazaba y yo lo besaba apasionadamente, realmente me entregué a él, también me puso de perrito, comenzando lentamente y después más fuerte, tomándome de mis caderas y después me acariciaba mis pechos y después me acariciaba atrás mientras me penetraba, después de lado, de cucharita, de cucharita con una pierna levantada, en fin muchas posiciones, en las que básicamente me faltaba el respeto pero, que yo no ponía ninguna resistencia; sin exagerar, fue una de las mejores «cogidas» que me han dado, pues, duramos alrededor de 2 horas y media haciéndolo.
    
    Después, él se sentó en la cama, de forma que quedo recostado y me pidió que lo montara, a lo que accedí sin pensarlo, mientras lo hacía yo me movía atrás y adelante mientras el con su mano me acariciaba mi ano, mientras que con su boca me besaba mis senos; todo esto al mismo tiempo. Me sentía realmente complacida, ya que, también se me venía a la mente que, hacia una semana simplemente era un compañero de universidad al que le gustaba y, en ese momento estaba ...
    ... siendo tocada y besada en toda mi intimidad, y lo que lo hacía más placentero, era que, nadie más sabia más que nosotros solamente. Así duramos como 10 o 15 minutos aproximadamente, al cabo de ese momento, nunca dejó de dedearme atrás mientras me lo estuvo haciendo, y me preguntó que, si quería sentirlo por atrás, a lo que acepte. Me dijo «Ponte de perrito Putita» y sin pensarlo lo hice, me dijo «ábrete las nalgas» y lo hice, acto seguido, comenzó muy lentamente a intentar penetrarme con su pene tan grande que tiene, al principio me dolió un poco, era solo cuestión de tiempo para que ese dolor se convirtiera en placer, placer que lentamente me empezó a dar. Así empezó por un rato, pero después empezó a acelerar el ritmo, y empezó una combinación de querer que parara y el de querer que me diera más duro, en ese momento, empecé a gemir más fuerte de lo que normalmente lo hice en todo ese tiempo, él se excito realmente por la forma en que lo hacía, «quiero hacer mención que en este momento que acabo de escribir esto, me excita un poco el recordar, el cómo me tenía, el imaginar desde otra perspectiva, como me tenía de perrito, bien abierta, y el montándome por detrás, sin duda, algo realmente excitante» de un momento a otro, comenzó a gemir, diciéndome que se estaba viniendo dentro de mí y así fue, se vino dentro de mí, pero por atrás
    
    Finalmente, cuando volvimos a la realidad asimilé con más claridad lo que acababa de ocurrir, y comencé a vestirme rápidamente, él hizo lo mismo, ...